La alimentación que llevemos a cabo en nuestro día a día es sumamente importante porque puede afectar a nuestra salud, por eso debemos tratar de incorporar productos saludables y dejar de lado los alimentos ultraprocesados.
De esta forma, si consumimos alimentos como el aguacate podemos retrasar el envejecimiento de nuestro organismo gracias a la multitud de antioxidantes que posee. O, en el caso del cardo, podemos también reducir el colesterol y prevenir ciertas enfermedades cardiacas. Pero, ¿sabes qué alimentos no son recomendables para nuestro organismo? Si alguna vez te has preguntado qué son los alimentos ultraprocesados y cómo puedes distinguirlos, te aconsejamos que sigas leyendo.
Alimentos ultraprocesados: qué son
Lo primero que debemos saber es que el procesado de alimentos es el proceso que permite convertir una materia prima en otro tipo de comida. Existen distintos tipos de alimento procesado y cuando hablamos de alimentos ultraprocesados nos referimos a aquellos cuyo resultado final no se parece en nada a los alimentos utilizados como materia prima. Por ejemplo los embutidos o las galletas.
La característica principal de estos alimentos es que suelen incorporar muchos azúcares añadidos, sales, grasas y otro tipo de aditivos. Lo que los convierte en alimentos poco saludables.
4 Claves para distinguir los alimentos ultraprocesados
Como acabas de ver este tipo de productos no son nada beneficiosos para nuestro organismo, pudiendo hacer que a la larga suframos ciertas enfermedades como, por ejemplo, problemas cardiacos. Por eso es importante que aprendamos a distinguirlos correctamente para así evitar comprarlos.
Siempre es mejor recurrir a otras recetas que podamos llevar a cabo con ingredientes naturales como una crema de zanahoria. De esta forma conseguiremos que nuestro organismo se mantenga sano.
A continuación te explicamos 4 aspectos que debes tener en cuenta para identificar los alimentos ultraprocesados:
- No se parece en nada al alimento de origen. Como hemos comentado al inicio, este tipo de alimentos sufren una completa transformación por lo que el producto final no se va a parecer en nada a la materia o materias primas con las que ha sido elaborado.
- Tienen una gran cantidad de ingredientes. Si miras su etiqueta habitualmente este tipo de productos cuentan con un amplio listado de ingredientes entre los que vas a encontrar sal, aditivos y muchas cosas más. Señal clara de que se trata de un alimento cuyo procesado ha sido alto.
- Contienen mucha sal. Cuando nos situamos por encima de un 1% de sal a la hora de mirar los ingredientes podemos estar seguros de que se trata de un alimento que no es recomendable para nuestra salud.
- Tienen grasas saturadas y aditivos. Finalmente, el mayor problema de los alimentos ultraprocesados es la gran cantidad de grasas saturadas y aditivos que tienen en su composición, los cuáles pueden provocar daños en nuestro organismo y hacer que aumenten nuestra predisposición a tener colesterol.
Como ves, identificarlos conlleva leer la etiqueta para ver cuál ha sido el procesado de los alimentos y los ingredientes que contienen. De esta forma podremos reconocerlos mucho más rápidamente.
Pero, ¿significa ésto que no debemos consumirlos nunca? No, ni mucho menos. Pero si que es importante que sepamos cuáles son para incluirlos lo mínimo posible en nuestra alimentación y sustituirlos por otro tipo de productos que sean más beneficiosos para nuestro organismo.