La cerveza y el vino son, con mucha diferencia, las bebidas alcohólicas favoritas de los españoles. En este país, es muy habitual que la gente se reúna en bares a tomar una cerveza o un vino acompañado de unos aperitivos.
Aunque esta actividad pueda hacer que la tarde sea divertida, no debería ser un hábito en absoluto, pues beber alcohol en exceso puede ser muy perjudicial para la salud. En cualquier caso, es cierto que la cerveza y el vino consumidos con moderación pueden aportar beneficios. Sin embargo, ¿cuál de estas bebidas aporta más? Te lo contamos a continuación.
¿Cerveza o vino?
Antes de responder a esta pregunta, tenemos que volver a dejar claro que el alcohol en exceso no es en absoluto saludable. Con moderación, podemos disfrutar de algunos beneficios que nos pueden aportar diferentes bebidas alcohólicas, pero si nos pasamos podemos correr el riesgo de padecer enfermedades graves en el futuro.
Argumentos a favor de la cerveza
Aproximadamente el 93% de un litro de cerveza es básicamente agua, pero también es cierto que el proceso de fermentación del cereal usado en su producción hace que sea una bebida que contenga entre un 4 y un 5% de alcohol de media.
Aunque no sea muy alto, sigue siendo un porcentaje nada desdeñable, pero la cerveza, consumida con moderación, es poco calórica y hasta puede contribuir a perder peso. Sí, has leído bien. Esto está demostrado en varios estudios científicos, que afirman que tomar cerveza de vez en cuando, siempre que se siga una dieta equilibrada, puede ser un buen remedio contra la obesidad y contra la diabetes tipo 2.
Argumentos a favor del vino
Una copa de vino tinto indudablemente aporta muchos más beneficios que un vaso de cerveza, pero evidentemente no se debe consumir en exceso. Entre los más importantes, encontramos los siguientes:
- Puede prevenir enfermedades cardíacas: su alta concentración en vitamina E y polifenoles ayudan a mantener la sangre y los vasos sanguíneos limpios, algo que es muy beneficioso para la salud cardíaca a largo plazo.
- Reduce el colesterol: los polifenoles que contiene son componentes con alta concentración de antioxidantes, los cuales evitan la formación de coágulos y de lipoproteínas de baja densidad (LDL o colesterol malo).
- Reduce el riesgo de padecer cáncer: precisamente por sus componentes antioxidantes, puede reducir este riesgo, sobre todo del padecimiento de cáncer de colon, de mama y de pulmón.
- Ayuda a perder peso: durante los últimos años, se han publicado numerosos estudios que afirman que ciertos elementos del vino tinto activan un gen que dificulta la formación de células adiposas o de grasa.
Conclusiones
Una vez repasados los principales beneficios de una bebida y de otra, nuestra recomendación es que, si vas a pedir alcohol, escojas o una copa de vino tinto o una cerveza sin alcohol. Son las dos alternativas más saludables que tienes para elegir. De todos modos, a lo que te animamos de verdad es a que lleves una vida sana, combinando una dieta equilibrada con actividad física diaria, o por lo menos frecuente.