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Cómo hacer un huevo frito perfecto

El huevo frito es una receta sencilla, y la puedes bordar.

El huevo frito perfecto

Cómo hacer un huevo frito perfecto no es tan fácil como parece con su clara bien hecha, su yema líquida para mojar pan y sus puntillitas tan crujientes. Solo está al alcance de unos pocos que tras años de práctica les sale de película y por supuesto a nuestras madres, unas verdaderas maestras en el arte de hacer unos buenos huevos fritos.

La mía siempre decía «¿Cómo puede ser que una cosa tan simple pueda estar tan rica?» y tenía toda la razón del mundo porque solo necesita aceite, huevo, sal y unas buenas manos para freírlo.

Ahora que para hacer un huevo frito sublime tiene sus estratagemas y secretos, así que te invito a seguir leyendo que te voy a desvelar todos los trucos que necesitas saber para qué termines siendo un experto profesional de este rico manjar.

Cómo hacer un huevo frito perfecto: videoreceta

Ingredientes:

huevo frito

Trucos y consejos

  1. El huevo tiene que estar fresco para que no se desparrame por la sartén y así se mantendrá la clara firme y le yema en su sitio.
  2. Sácalo antes de la nevera para que esté a temperatura ambiente.
  3. Ten cuidado cuando casques el huevo para que no se rompa la yema, a mí me da muchísima rabia cuando pasa.
  4. Para que no te salpique no rompas la cascara en el borde de la sartén y lo pongas el huevo directamente en el aceite.
  5. También puedes echar una pizca de sal al aceite antes de poner el huevo para que absorba un poco el agua de la clara.
  6. Y por supuesto usa una sartén antiadherente para que no se pegue.

Cómo hacerlo para que salga bien.

Casca el huevo en una taza o un plato hondo para que no te salpique y no se rompa la yema.

Coge una sartén no muy grande, echa un dedo de aceite y cuando esté humeando (sin que llegue a quemarse) pones el huevo con cuidado.


Pon la sal mientras se está haciendo para que salte menos. Aunque la puedes poner antes o después, eso como más te guste.

Con la ayuda de una espumadera o una cuchara salpica el huevo con el aceite para que se haga por encima pero no te pases porque la yema se puede cuajar.

Y cuando esté a tu gusto lo sacas y lo pones en un plato.

Sirve inmediatamente para disfrutar de un buen huevo frito.

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