Las manchas más difíciles de sacar de la ropa blanca son esas que aparecen con el uso en la zona de las axilas. Estas manchas aparecen debido a la acumulación de sudor y antitranspirantes, y aunque hagamos un esfuerzo extra al momento de la limpieza, en la mayoría de las ocasiones permanecen intactas.
Las manchas en la ropa con el paso del tiempo se tornan un poco amarillentas, ocasionando que tengas que descartar tus prendas blancas. Las prendas de color solo se ven un poco más oscuras, que, aunque no resaltan tanto como las manchas amarillas en la ropa blanca, de igual forma, no son nada agradables. Afortunadamente, hay distintos métodos que te ayudarán a eliminar este tipo de manchas. Hoy te enseñaremos uno muy efectivo que además es barato, ya que su principal ingrediente es bicarbonato de sodio.
Truco para quitar las manchas amarillas de las axilas de la ropa blanca
Debes saber que el bicarbonato de sodio es tu gran aliado en estos casos de limpieza de las prendas de vestir. Con la mezcla que te presentaremos a continuación estamos seguros de que podrás quitar cualquier mancha, este es un truco efectivo que te ayudará a hacer más fáciles las tareas del hogar y que solo requiere de 3 ingredientes, los cuales seguramente ya están en tu cocina.
Para poner en práctica este consejo necesitas bicarbonato de Sodio, vinagre, sal de mesa y un poco de agua. Antes que nada, debes humedecer tu prenda y aplicar un poco de sal sobre la mancha. Deja que actúe por algunas horas, se recomiendan que sea al menos 12 horas. Una vez que transcurra ese tiempo, frota la prenda en la zona donde se ubica la mancha, con el fin de que penetre por completo la sal.
El siguiente paso es mezclar bicarbonato y vinagre en un poco de agua, con el fin de hacer una especie de pasta que puedas frotar. Es importante considerar que, si la mancha no es muy fuerte, puedes omitir el paso de la sal y puedes aplicar directamente la pasta de bicarbonato.
Aplica la pasta que acabas de preparar sobre la mancha y espera a que seque. También se recomienda que dejes que actúe un tiempo prudencial antes de retirar. Pero en este caso puede ser unos 30 minutos. Retira la pasta y lava tu prenda de la forma habitual. Cuando saques tu camisa de la lavadora, podrás ver a simple vista que ya ha quedado libre de manchas.
Si los residuos de antitranspirante o la mancha persisten, puedes repetir este proceso, pero esta vez no dejes de poner la sal e intenta frotar vigorosamente después de cada paso. La reacción de estos productos arrastrará las partículas adheridas a la tela y te librarás de esa mancha que no permitía que usarás tu ropa con seguridad.
