Llega el verano y nos invade el calor, sufrimos temperaturas infernales, el sofoco y el agobio nos vencen y se apoderan de nuestro físico y mente. No somos un cuerpo andante, somos un emblema viviente de la pereza.
No tenemos ganas de hacer nada, lo único que deseamos es descansar acompañados de nuestro fiel aire acondicionado, que vaya cayendo el día para bajarnos a nuestra terraza preferida y disfrutar de un merecido refresco, o café con hielo, o granizado de sabores varios, o un helado de sabores diferentes o algo que haga resucitar a nuestra garganta y provoque la resurrección de nuestro cuerpo convaleciente.
Lo cierto es que es así como muchas veces el verano golpea nuestro organismo y provoca que nos sintamos bastante mal, pero el verano también es una época perfecta para realizar multitud de tareas y trabajos que en otros momentos del año resultan realmente complicados o imposibles de realizar.
Una de estas faenas donde el verano se ofrece como la mejor época son las reformas a realizar en nuestro hogar. Es el momento ideal para hacer realidad todas esas reformas que llevamos tiempo queriendo llevar a cabo y que nuestra casa está pidiendo a gritos. No te de miedo, podéis hacerlas por vuestra cuenta ( si eres realmente valiente, que no es mi caso 😉 ) o se las podéis encargar a una de las muchas empresas de construcción que existen y que están al alcance de vuestra mano, mejor dicho, de vuestro ratón; solo tienes que buscar e indagar por la gran selva de internet.
Son muchas las virtudes y beneficios que ofrece el verano para realizar las reformas en el hogar. Coged papel y bolígrafo que voy a enumerarlas.
Los días son más largos. Durante esta época disponemos de más horas de luz natural y resulta más cómodo y práctico realizar los trabajos, tanto fuera como dentro de la vivienda.
Las empresas de construcción tienen menos trabajo. Muchas empresas de reformas bajan el volumen de trabajo durante estos días, lo que nos permite tener
Las empresas de construcción tienen menos trabajo. Muchas empresas de reformas bajan el volumen de trabajo durante estos días, lo que nos permite tener más facilidad a la hora de contratarlas para que realicen las obras que necesita nuestro hogar.
En verano no hay tanta humedad. La falta de lluvias durante estos meses facilita el trabajo continuo a la hora de ejecutar una reforma, con el correspondiente ahorro de tiempo y dinero para nuestro bolsillo 😉 ¡Cómo me gusta el verano!
Menos molestias para los vecinos. Los vecinos se van a encariñar con vosotros si las reformas las hacéis en verano. Mucha gente se marcha de vacaciones y es el momento ideal para realizar obras en casa y evitar a los vecinos todas las molestias que provocan las reformas.
Reparar la casa para el invierno. ¡Fácil! ¿Cuál es la mejor época del año en la que preparar vuestro hogar para el invierno? El verano, ¿verdad? Pues eso, ni lo dudéis.
Ciertos materiales y reformas tienen mejor aceptación durante este tiempo. Pintar en casa o enyesar las estancias se deben de realizar en una época tan conveniente como el verano. Te será mucho más fácil de realizar en estos meses en los que el calor predomina y que las obras de este tipo tengan el acabado perfecto y que tu casa se merece.
Ventilar, limpiar o eliminar los olores, mejor en verano. A todos nos encanta que nuestro hogar huela bien. Mucho mejor el verano para eliminar y hacer desaparecer los olores desagradables que se producen durante las obras. Al no hacer frío podemos realizar todas estas labores sin necesidad de sufrir bajas temperaturas.
Ya me voy, pero antes de dejaros hasta el próximo post recordaros que lo primero que debéis de hacer es solicitar todas las licencias y permisos necesarios para poder comenzar la reforma. Es importante comunicar a vuestra comunidad de vecinos que vais a realizar una obra en vuestra vivienda y, a ser posible, indicarles las fechas de comienzo y finalización de los trabajos.
Seguro que os va a costar el realizar en verano las obras que vuestra casa seguro que necesita; solo pensar y visualizar lo bien que va a quedar vuestro hogar cuando todo termine, cuando llegue el momento que, con un buen té helado en la mano, vayas recorriendo la casa después de finalizar la reforma y tu sonrisa vaya aumentado al descubrir lo bonita que ha quedado. ¿A que parece que estrenáis casa?