Gran parte de la población tiene dificultad en la calidad de su visión, relacionado con ello, los profesionales expresan que el uso prolongado de luz artificial a corta distancia, empeora la magnitud de la miopía en infantes con predisposición genética. Por otro lado, las pantallas electrónicas generan fatiga ocular, visión borrosa y dolor de cabeza. Además de eso, la higiene es uno de los factores más importantes a la hora de prevenir infecciones, no solo a la salud de nuestros ojos, sino a nuestra vista a largo plazo.
Una de las maneras de corregir la visión es utilizar gafas correctoras, lentes de contactos, o también conocido como lentillas. Sin embargo, con respecto a estas últimas, la manipulación, cuidado y limpieza correcta es delicada y amerita tratos especiales para garantizar que se mantengan libres de bacterias, infecciones como la conjuntivitis y que duren más tiempo.
En una ocasión pasada te revelamos los métodos más eficaces para limpiar gafas sin rayarlas. Hoy te contamos cómo limpiar los lentes de contacto reutilizables correctamente en casa sin dañarlos, cuáles son los líquidos limpiadores recomendados y cómo cuidarlos de manera adecuada.
Recomendaciones para la limpieza de las lentes de contactos
Las lentillas reutilizables pueden ser de una duración semanal, mensual, trimestral o anual. A diferencia de los desechables (se usan una vez y se botan), estos se limpian y se guardan hasta el próximo uso, es por ello que para conservarlos en buenas condiciones y prevenir una infección, se debe asegurar un buen mantenimiento y seguir los pasos pertinentes para su óptima higiene.
- Antes de manipular la lentilla, lávese bien las manos con agua y jabón y séquese con una toalla que no suelte pelusa.
- Una vez tengas las manos limpias, vacía ambos receptáculos del estuche y llénalos con solución desinfectante nueva.
- Hecho esto, coloca uno de las lentes sobre la palma de tu mano y agrega unas gotas de solución desinfectante fresca (no la misma del estuche) sobre el lente para enjuagarlo.
- Frota con la yema de los dedos suavemente a cada lado para eliminar los la suciedad o residuos de su superficie.
- Enjuaga nuevamente con más solución y colócalo nuevamente en el estuche lleno de solución.
- Realiza el mismo proceso con el otro par, guárdalos y déjalos en remojo hasta el próximo uso.
A tener en cuenta: Evite tocar las lentes con las uñas, puesto que, además de rayarlos o romperlos, en esta zona se aloja una elevada cantidad de bacterias y suciedad.
¿Cómo limpiar el estuche de las lentes de contacto?
Si notas manchas o alguna suciedad en el estuche, es momento de llevar a cabo un aseo obligatorio. Sigue estos pasos:
- Antes que nada, vacía y limpia la superficie con solución de desinfección o productos de limpieza específicos para lentes de contacto estériles nuevos.
- Frota con los dedos y enjuaga nuevamente el portalentes con solución fresca.
- Déjelo tumbado y abierto boca abajo para que se seque y reemplácelo cuando el profesional o el rótulo del estuche lo indique.
Nota: No utilice jabones a base de aceite o perfumados, ya que podrían empañar o ensuciar las lentes.
Productos o líquidos para la limpieza de lentes de contactos
Es imprescindible que sepas que no se debe usar agua común para su conservación, pues no se desinfectarán adecuadamente y será más propensa la transmisión de gérmenes al ojo. Así que, si no tienes productos limpiadores especiales para este fin, lo recomendable es no utilizar las lentillas. Si emplea cualquier tipo de lentes de contacto de quitar y poner más de una vez, debe desinfectarlos con líquido especial para mantenerlos limpios y libres de gérmenes nocivos. Estos son los más aconsejados:
- Limpiador enzimático: Eche una pastilla enzimática en cada compartimento del lente. Espere a que estas se disuelvan, y a continuación añada sus lentes de contacto. Déjelos dentro durante el tiempo necesario (normalmente, 15 minutos).
- Colirios: Sirven para lubricar el ojo y rehumedecer las lentes de contacto. Asegúrese de elegir una marca idónea y segura para las lentillas.
- Eliminador diario de proteínas: Rellene los dos pocillos del estuche para las lentes con la solución multiusos y, a continuación, añada una gota de eliminador diario de proteínas en cada uno.
Presta atención a las fechas de caducidad de las soluciones para las lentes de contacto, especialmente las que no poseen conservantes. Las soluciones salinas sin conservantes que no son un aerosol deben desecharse dos semanas después de haberlas abierto para reducir el riesgo de contaminación.
Limpiar lentillas reutilizables: Consejos finales
No mezcle las lentes de contacto para el ojo izquierdo y el derecho. Habitúese a poner y sacar primero el mismo lado en primer lugar para que no se confundan.
- Antes de ponérselos compruebe que no estén dañados o al revés.
- El lente debe ser como una taza. Si está de adentro hacia afuera, tendrá la forma de un platillo, con los bordes hacia afuera.
- Para ponértelo, enjuágalo con solución salina y colóquelo en la punta del dedo índice de su mano dominante, tira del párpado inferior hacia abajo con el dedo medio de la misma mano, y, con la otra mano, levante el párpado superior para colocar suavemente el lente en el ojo sin pestañear.
- Cuando haya terminado, cierra los ojos lentamente y parpadea con ligereza un par de veces.
No olvides que las lentes de contacto varían de acuerdo a tus condiciones visuales, preferencias y claro, tu presupuesto. Ten presente que las lentes de contacto presentan diferentes sensibilidades e incompatibilidades químicas con respecto a su limpieza, es por ello que existe una solución líquida desinfectante o “líquido de lentillas”, formulado específicamente para conservarlas limpias, frescas, húmedas y libres de focos de contagio de infecciones oculares.
Consulta siempre a tu profesional de la salud visual de confianza antes de elegir una solución para asegurarte de que es compatible.
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