¡Oh, ansiado, emocionante y amado verano! Época en la que podemos pasar más tiempo con nuestros seres queridos sin la preocupación de la escuela o de la limpieza de los abrigos, guantes o edredones. Sin embargo, actividades como ir a la playa, piscina, tomar un café al aire libre o preparar una parrilla en la terraza en días en los que el sol es implacable se vuelven una odisea. He ahí cuando los protagonistas son los toldos.
Es grande la cantidad de restaurantes, balcones y casas que disponen de un toldo de lona o plástico para proteger de los rayos UV y también de la caída de objetos. No obstante, están expuestos al sol y suciedad directa, lo cual, a la larga, si no se limpian, va deteriorando el material.
Si tienes uno en casa o negocio y quieres saber cómo limpiar un toldo correctamente y mantenerlo en buen estado, toma nota y conoce los mejores consejos para limpiarlos y cuidarlos de acuerdo al material con el que fue elaborado. ¡Busca papel y lápiz!
Cómo limpiar los toldos de lona o de plástico
Es fundamental agregar la limpieza de los toldos en la lista de tareas domésticas, tal vez no diarias, pero sí al menos una vez al mes. Y uno de los momentos más recomendados para realizar una limpieza profunda es a final del verano, puesto que, llegados los días fríos, por lo general se guardan y se mantienen alejados de suciedad.
Ten en cuenta que la limpieza de los toldos no es igual para todos, y no exactamente por el tipo de instalación o el sitio donde están montados, sino por el material de con el que fueron fabricados. Fíjate a continuación la manera adecuada de limpiar toldos fácilmente:
Toldos plásticos
Son considerados uno de los más frecuentes en zonas como terrazas, ventanas y balcones con salida al aire libre, principalmente porque son impermeables y no acumulan tanta suciedad, lo cual hace de su aseo un trabajo más sencillo:
- Retira el polvo, tierra, hojas, basura y cualquier elemento de considerable tamaño antes de lavarlo. Esto evitará que se corra riesgo de rayarlo y se alarga la vida útil del toldo.
- Mezcla en el barreño, agua y jabón arrancagrasa (que no sea demasiado abrasivo), vierte sobre el toldo y cepíllalo haciendo presión en las áreas donde haya manchas y mugre más pegada.
- Aclara con abundante agua las veces necesarias hasta eliminar todo el jabón y déjalo secar al aire libre.
Importante: No dejes que se seque el agua con jabonosa, pues podría ocasionar manchas difíciles de quitar.
Toldos de lona
En España los toldos de lonas son los más utilizados para la protección de los rayos del sol, esto se debe a su alta calidad y durabilidad, de hecho, si se cuidan de manera idónea, pueden conservarse hasta 15 años en buen estado:
- Antes que nada, humedece con agua caliente y luego prepara una mezcla con agua y jabón.
Hecho esto, empapa un paño de algodón o un cepillo y frota con él todo el exterior de la lona, con más precisión en las áreas manchadas y zonas con moho. - Si las manchas de verdín no salen, utiliza quitagrasa para limpiar y aplica un producto antimoho especial para lona y restriega con suavidad para no maltratar el material, déjalo actuar durante de 15 a 20 minutos y luego aclara con agua fría a presión.
- Deja secar el toldo al sol y no lo enrolles estando húmedo, puesto que esto acelera el crecimiento del moho y marcas de humedad.
Nota: Si no ha funcionado este método y notas manchas secas o muy persistentes, prueba limpiar con una vaporeta para desprender la mugre más complicada y rebelde.
Y no olvides también limpiar la parte interna del toldo (la que queda mirando al suelo). Aunque no se acumula tanta suciedad en comparación a la parte exterior, también requiere limpieza periódica para mantenerse impecable.
