La organización de los espacios del hogar es un tema de gran interés en la actualidad y fundamental para conseguir que el orden se apodere de tu casa, pero ¿qué hacer cuando estos espacios son ínfimos y pequeños y solo dispones de pocos metros cuadrados para dar alojamiento a tus objetos?. Marie Kondo y su famoso método KonMari tienen la solución para eliminar el desorden de aquellos lugares pequeños y alcanzar mediante el minimalismo el orden deseado.
Estamos acostumbrados a tener mucho espacio para disponer de una decoración que no se vea forzada y sentirnos cómodos a nuestras anchas, pero los espacios pequeños, bien decorados, pueden entregarnos esta misma sensación de amplitud y de orden. La clave para lograrlo la ofrece el método KonMari de la escritora japonesa Marie Kondo, quien hace alarde de una singular estética y dominio organizacional del espacio, aunque sea reducido y limitado.
Ordenando los espacios pequeños con Marie Kondo
Orden y atención son primordiales para observar los espacios disponibles del hogar, una acción que te garantiza que los espacios por pequeños que sean puedas aprovecharlos al máximo. Marie Kondo parte del principio de que la mayoría de las casas tienen problemas de limitaciones de tamaño y a pesar de ello se suelen llenar de objetos como una estrategia de decoración. Por lo que unas buenas ideas de orden son necesarias para abordar esta problemática.
El aprovechamiento de los espacios tiene que ser extremo en aquellos lugares donde no existe de sobra, logrando que la sensación de amplitud se adueñe de los hogares, pero manteniendo el orden deseado para que los ambientes aunque sean pequeños puedan desprender la necesaria dosis de bienestar y al mismo tiempo solo conservar aquellos objetos que sin lugar a dudas nos ofrezcan sus altas dosis de alegría.
Marie Kondo organiza los espacios pequeños intensivamente
La premisa de organizar y volver a organizar es fundamental y clave para maximizar las opciones de almacenamiento y de espacio para cualquier hogar, el orden y la organización tienen que comenzar con aquellos objetos que están acumulados y que ya no tienen ningún propósito efectivo de funcionalidad o que se encuentren en una fase de desactualización. Organiza estos espacios con ayuda de cajas y cestas organizadoras que tengan la característica de ser apilables.
Almacenamiento en vertical
Una manera extraordinaria de aprovechar el espacio de las paredes es con el almacenamiento vertical, recurre a armarios de doble altura e incorpóralos al dormitorio sin desperdiciar su parte alta para almacenar la ropa de temporada, las maletas o las mantas que generalmente ocupan bastante espacio. Recuerda no almacenar cosas pesadas en las alturas para evitar cualquier posible accidente y consigue una escalera de mano para alcanzar la mayor altitud posible.
No olvides los espacios bajo la cama
Todas las camas tienen una función de almacenamiento incorporada y pueden funcionar como armarios adicionales, muchos modelos de camas incluyen cajones y si no los traen puedes perfectamente usar los espacios bajo el colchón para guardar una gran cantidad de cosas, eso sí, siempre en cajas organizadoras y desecha todo aquello que ya no uses.
Estantes y armarios para dividir
Las paredes vacías son perfectas para incluir armarios flotantes para almacenar libros, accesorios, recuerdos y juguetes pequeños, también existen los estantes ajustables que son ideales para aumentar la capacidad de los armarios que ya existen. Así mismo, si existe alguna estancia con espacios abiertos, puedes incluir armarios de altura completa o de media altura en vez de una pared, con ello lograrás privacidad y espacios extras para almacenar.
Muebles multifunción y empotrables
Los muebles empotrados y los multifuncionales aportan una gran calidad de orden y de organización a los espacios pequeños por la simple razón de que están empotrados o son flotantes. También es posible que consigas crear nuevas zonas de almacenamiento, como por ejemplo bajo las ventajas, bajo las escaleras o sobre las cabeceras de las camas.
Rincones, huecos y puertas
Los lugares olvidados para almacenar y ganar espacio en todas aquellas casas de pequeñas y reducidas dimensiones, armarios estrechos dentro o en los alrededores de las puertas, además de utilizar los espacios olvidados y que son catalogados como incómodos: rincones, pasillos y espacios estrechos, incluidos los huecos que generalmente solo acumulan polvo y suciedad.