La calefacción siempre ha sido uno de los sistemas más usados dentro de las viviendas para proporcionar calor a las mismas durante las épocas de frío. Pero, con la reciente subida del precio de algunos combustibles como el gas, es necesario valorar otras alternativas.
Hoy venimos a hablarte, precisamente, de una de las opciones que más interés está despertando en los usuarios por su alta eficiencia energética y el ahorro que proporcionan. Continúa leyendo para saber más sobre las termochimeneas.
Termochimenea: qué es y cómo funciona
Existen distintos tipos de chimeneas que nos ayudan a generar calor dentro de una vivienda y, unas de ellas, son las termochimeneas, de las cuales te vamos a hablar en detalle a continuación.
Una termochimenea es un tipo de chimenea que nos ayuda a proporcionar calor a una estancia de manera más efectiva que los dispositivos tradicionales o la calefacción. Pueden funcionar con leña, gas o electricidad y algunas incluyen un ventilador que ayuda a distribuir el calor por el espacio.
A diferencia de las chimeneas tradicionales, que a menudo son consideradas como una fuente de calor secundaria, las termochimeneas se pueden utilizar como la principal fuente de calefacción de una casa. Sin embargo, es importante saber que este tipo de dispositivos pueden requerir más mantenimiento y ser más costosas que otras formas de calefacción.
Por eso es esencial valorar nuestro presupuesto antes de tomar la decisión de incorporar un dispositivo de este tipo en nuestra vivienda.
5 ventajas de las termochimeneas frente a la calefacción
Una vez sabemos en qué consisten estos dispositivos, es crucial ver las distintas ventajas que puede aportarnos el hecho de adquirir una termochimenea para nuestra vivienda. ¡Toma nota!
- Eficiencia energética. Como hemos comentado desde el inicio, estos elementos suelen ser más eficientes en términos de calefacción que las chimeneas tradicionales, lo que puede ayudarte a ahorrar dinero en tus facturas de energía.
- Fuente de calefacción principal. Su gran eficiencia energética hace que estos dispositivos puedan ser utilizados como la principal fuente de calefacción de una casa, lo que significa que no es necesario contar con otros sistemas de calefacción. Esto, a la larga, también nos va a generar un mayor ahorro económico.
- Mejor distribución de calor. Por otro lado, existen modelos de termochimeneas que incluyen ventiladores cuyo objetivo es ayudar a distribuir el calor por el espacio, lo que puede ser útil para calentar grandes habitaciones o áreas abiertas.
- Generan un ambiente acogedor. Al igual que ocurre con los modelos de chimenea más tradicionales, las termochimeneas pueden proporcionar un ambiente confortable y mucho más agradable.
- Menos humo. Pese a que también necesitan una salida de humos, suelen ser más eficientes en la eliminación de este. Un aspecto que puede ser especialmente importante si vives en una zona con restricciones en cuanto a la emisión de humo.
En resumen, las termochimeneas son una excelente alternativa en caso de que estés pensando incorporar una fuente de calor en tu vivienda distinta a la calefacción, pero cuya eficiencia energética sea mayor. No obstante, es importante que valores el precio de este tipo de dispositivos antes de adquirir uno para ver si encaja en tu presupuesto.
Cuál es la leña más recomendable para una termochimenea
Hay muchos tipos de madera, pero la que más poder calorífico tiene es la de encina. Hay otros tipos, pero nosotros te recomendamos la de este árbol, pues es la que mejor calefacción te va a brindar. Si utilizas la madera de encina, comprobarás que dura mucho más que la leña convencional que la gente suele comprar más a menudo. ¡Pruébala!