El invierno es una de las épocas del año en las cuales más consumo energético tenemos, tanto en el ámbito de la electricidad como en lo que se refiere a gas. Es normal, se trata de una temporada en la cual pasamos más tiempo en casa y, como tal, debemos calentar y proveerla de todos los recursos necesarios para tener una vida confortable.
No obstante, en los últimos años el consumo energético se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza debido al alto precio que está experimentando la energía. Algo que hace que busquemos, cada vez más, la manera de recortar nuestro consumo para así conseguir bajar el importe de la factura de la luz.
Pero no te preocupes, existen formas en las cuales podemos recortar nuestro consumo eléctrico y hoy venimos a contártelas. Así que, si quieres saber como puedes ahorrar en electricidad durante el invierno, te aconsejamos que sigas leyendo.
X consejos para ahorrar electricidad durante el invierno
La electricidad es uno de los recursos que más necesitamos durante nuestro día a día y, por eso, en ocasiones nos resulta complicado saber cómo podemos recortarlo sin que nuestros hábitos de vida se vean afectados.
Pero no te preocupes, existen algunas pautas que podemos aplicar a diario y que te ayudarán a notar un descenso en tu factura de la luz. Continúa leyendo porque te las vamos a explicar a continuación.
1. Sé consciente de lo que gastas
Lo primero que debemos entender es como funcionan los distintos dispositivos que tenemos en nuestra casa y cuál es su consumo de electricidad. En este sentido, debemos saber que el calor que se produce mediante el uso de electricidad es muy caro y encender un pequeño calefactor ya nos puede suponer entre 1KWh o 1.5KWh.
Esto implica que, si lo tenemos encendido una media de 4 o 5 horas, deberemos multiplicar esta cifra por el tiempo encendido y luego el precio actual de la electricidad. Verás como el consumo de este pequeño aparato es mucho más elevado que el que pueda tener otro tipo de sistemas.
Esto no significa que no puedas utilizar calefactores, sobre todo si vives en una zona en la cual las temperaturas son excesivamente frías, pero sí que es importante que moderes su uso en la medida de lo posible. Además de elegir un buen calefactor eléctrico cuyo consumo cuente con la mayor efectividad energética posible.
2. Organiza tu vivienda de manera eficiente
Esto implica saber el uso que das a tu casa y como puedes organizarla para que el calor se mantenga durante más tiempo y así no tener que hacer un mayor uso del calefactor. Algunos hábitos que puedes incorporar son:
- Cerrar las puertas de cualquier habitación que no estés usando para que el calor se mantenga en ella.
- Siempre que vayas a utilizar un calefactor, cierra la puerta para que esta se caliente antes y no se pueda escapar el calor porque de esta forma podrás reducir de manera considerable el tiempo de uso de este tipo de aparatos.
3. Utiliza elementos textiles de invierno
Una de las cosas que debemos recordar es que la calefacción de una vivienda debe mantenerse en torno a los 20 grados y no más elevada, por lo que no es necesario que estés en manga corta en tu propia casa.
Lo mejor para soportar el frío es utilizar aquellos elementos que están pensados para esta época como son las mantas, los calcetines de lana, las alfombras, etc. De esta forma, no solamente te abrigas tú sino que también incorporas en tu casa aquellos elementos que pueden ejercer de aislantes y que nos permiten evitar que el frío entre a la misma.
4. Elige otras alternativas para calentarte
Recurrir a la electricidad es algo sumamente práctico, pero no es la única opción que tenemos a mano. Existen las chimeneas, los paneles solares y otra serie de recursos que se engloban dentro de las energías renovables y que nos pueden ayudar a ahorrar de manera muy considerable en nuestras facturas.
Además, las chimeneas son un excelente elemento decorativo que le dará un toque muy hogareño a tu casa.
5. Controla las corrientes de aire
Muchas veces no nos damos cuenta, pero a través de las rendijas de nuestras ventanas, se puede colar el frío de la calle. Esto hace que la calefacción o los calefactores tengan que trabajar el doble para conseguir calentar nuestra vivienda, por lo que estaremos gastando más energía de la necesaria.
Por eso es importante que controles ves si esto se produce y, en caso de que sea así, lo soluciones ayudándote con rellenos de espuma o cualquier otro tipo de material que sea aislante.
6. Utiliza elementos de bajo consumo
Finalmente, pero no por ello menos importante, también es importante que apliques aquellos elementos que te pueden ayudar a reducir el consumo energético, como pueden ser las bombillas de bajo consumo. Si cambias todas las bombillas de tu casa por unas de este tipo, vas a ver como tu factura energética se reduce de forma considerable.
Y no olvides conocer cómo es tu factura de la luz para saber si tienes periodos en los que el precio de la energía sea más bajo porque quizás te interese realizar distintas tareas a esas horas como puede ser el caso de poner lavadoras, el lavavajillas, etc.
En definitiva, realizar un consumo energético consciente puede ayudarnos a establecer algunas pautas que nos permitan reducir nuestro consumo de electricidad durante el invierno para así reducir el importe de la factura de la luz. Esperamos que estas ideas te resulten útiles y te permitan hacer frente al invierno de una manera mucho más eficiente, energéticamente hablando.