Si ha llegado la época de la Navidad, o bien te han regalado una pata de jamón y es la primera vez que tienes algo así en casa, no te preocupes, porque aunque a priori pueda parecer complejo realmente solo hay que saber algunos detalles para poder aprovecharlo y disfrutarlo al máximo. Saber cómo empezar un jamón es algo que aprenderás una vez, y que de ahora en adelante sabrás siempre.
Es lógico pensar que si tienes una pata de jamón necesitarás, para empezar, un jamonero, que es el soporte en el que se coloca la pata para poder cortarla. Pero después de esto hay muchas cuestiones sobre las que pensar: el tamaño, el tipo de jamón y también el uso que le vamos a dar son puntos importantes.
¿Se empieza la pata de jamón por algún lado determinado? ¿Debemos tener en cuenta el tiempo que está pasando desde que la abrimos? ¿La pezuña va hacia arriba o hacia abajo? ¡Vamos a resolver todas estas dudas!
Datos interesantes sobre cómo empezar un jamón
Es realmente importante saber qué tipo de jamón es el que tienes en casa y quieres empezar, porque esto va a decir mucho sobre cómo puedes consumirlo. En el caso de que tengas, por ejemplo, un jamón ibérico de bellota, este ha sido madurado durante muchos meses y por tanto va a resistir al paso del tiempo más que otro que esté todavía más fresco.
Pero, si no es ibérico, si que debes tener en cuenta el tiempo. Si vas a usar el jamón para un evento determinado, o vas a tener muchas visitas durante las Navidades y por tanto el consumo de jamón va a ir mucho más rápido, no debes preocuparte tanto, pero si pretendes usarlo en el tiempo, aquí te damos algunos consejos:
- Lo más recomendable para empezar un jamón y aprovecharlo al máximo es colocar la pezuña hacia abajo para poder iniciarlo por la parte de la babilla. Esta babilla es lo que ves que es más estrecho de la pata de jamón, y que suele secarse primero. Nada más llegar el jamón la babilla estará perfecta para degustarla, y la parte más ancha puede esperar un poco más.
- También es recomendable una vez sujetada la pata en el jamonero, hacerle un corte al final de la caña, es decir, en el extremo contrario a la pezuña. Allí vas a encontrar el hueso del jamón que es lo que de hecho se llama caña. Esto ayudará a que el jamón no se seque.
- Los cortes a la hora de empezar un jamón, pero también durante todo el tiempo que dure, deben de ser siempre desde la zona del hueso hacia la pezuña, y no al revés. Esto es importante para conseguir cortes finos y perfectos.
- Para empezar la zona de la babilla tendrás que cortar una primera capa de piel y corteza, y ahí encontrarás al fin la carne del jamón para empezar a disfrutarla. Eso si, no deberías tirar esa corteza porque puedes colocarla sobre la parte del jamón que va abriéndose y así ayudar a conservarlo mejor por más tiempo, sin secarse.
- Otro detalle que tienes que saber es que no es recomendable cortar el resto de grasa que rodea al jamón. Hay muchas personas que a la hora de limpiarlo, cortan por primera vez no solo la tapa de corteza para después empezar a comerlo, sino todos los laterales. Esto se hace por ejemplo cuando el jamón ha sido comprado para un evento y posiblemente va a consumirse en un solo día. Pero si quieres conservarlo por más tiempo, debes saber que esa capa de grasa y corteza ayuda a proteger al jamón y mantenerlo fresco.
Ahora que ya sabes cómo empezar un jamón, ha llegado tu momento para empezar a cortarlo. Esto requiere de práctica, y seguramente sabrás hacerlo mucho mejor cuando el jamón vaya avanzando que en los primeros cortes, pero no te preocupes porque con estos sencillos trucos va a durarte el suficiente tiempo como para manejarlo a la perfección.