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Decora el dormitorio más romántico para celebrar San Valentín por todo lo alto

Flores, velas, globos de colores y guirnaldas de luces darán una ambiente íntimo y cálido al dormitorio

San Valentín se acerca y es el momento de empezar a pensar en esa decoración íntima y especial con la que sorprender la pareja en un día muy especial. No solo hay que pensar en el salón o en la mesa. Si queremos un ambiente realmente romántico, también debemos prestar atención al dormitorio y ambientarlo como se merece para la ocasión.

Evidentemente, en San Valentín flores y velas serán los grandes recursos decorativos, pero no los únicos. Hay muchas formas de ambientar el dormitorio, algunas clásicas, otras muy divertidas. Todo dependerá de tu estilo de vida y de cómo quieres celebrar el día. Las que vamos a explicar son ideas muy sencillas, rápidas y vistosas para llenar la habitación de romanticismo.

Decoración clásica para un dormitorio romántico

La decoración que nunca falla en una día como el de San Valentín es la más clásica. Las protagonistas son las flores. Una posibilidad es repartir pétalos sobre la cama como al descuido. Otra es hacer la forma de un corazón con ellos, o sustituirlos por un simple ramillete que sea vistoso. Y, para que el efecto sea total, dos ideas más: colocar algunos pétalos en el baño del dormitorio y hacer un pequeño camino hacia él también con hojas de flores.

petalos de rosa en la cama

El acompañamiento perfecto, cómo no, serán las velas. Pueden ser en colores claros para un estilo más sereno y elegante o rojas para simbolizar la pasión. Es importante, en cualquier caso, elegir velas aromáticas. ¿Ideas? El aroma a jazmín es sensual, la vainilla y la canela son afrodisíacas y el de las rosas es el clásico de San Valentín.

Pero a veces lo más sencillo es también lo que mejor funciona. Por eso hay una alternativa más rápida y muy vistosa. Basta con buscar una bandeja que sea bonita, colocar en ella unas copas de cava y adornar con un par de velas y unos pétalos de flores. Solo hay que colocarla encima de la cama junto al regalo para la pareja y en un momento habremos conseguido ese toque romántico imprescindible para el dormitorio.

El toque final podemos ponerlo matizando la iluminación. Si la de las velas es insuficiente, o sencillamente no queremos ponerlas, unos pañuelos sobre las lámparas de las mesitas de noche crearán ese ambiente acogedor e íntimo que estamos buscando para acabar por todo lo alto la celebración de San Valentín.

Decoración divertida y diferente para el dormitorio

Para quienes piensen que lo clásico, aunque funcione, es algo aburrido, hay mil ideas para decorar el dormitorio de una forma mucho más alegre y colorida, por ejemplo, los globos. Llenar la cama de globos rojos, rosas y blancos es una idea sencilla y muy resultona. Los hay, además, en forma de corazón, muy apropiados para este día.

Las guirnaldas también pueden dar ese toque romántico y a la vez divertido al dormitorio. Dos ideas. La primera es hacerlas con cartulinas y colocarlas sobre el cabecero, pueden ser corazones, globos o esas palabras maravillosas que expresan todo nuestro amor. La segunda idea es utilizar esas guirnaldas de luces blancas que teníamos de las Navidades y hacer con ellas, por ejemplo, un corazón que decore ese mismo cabecero.

Pero con esas guirnaldas de luces aún podemos hacer mucho más. Esta es otra idea es de lo más romántica: buscamos unas fotos de los dos que nos gusten, las imprimimos en papel y las colgamos de esa guirnalda haciendo un collage de momentos maravillosos vividas en pareja. Para darle un poco más de ambiente al dormitorio, podemos colocar sobre la cama unos cojines con motivos románticos. No será necesario nada más.

No hay que olvidarse de la ropa de cama

Para la ocasión también hay que buscar una ropa de cama que sea especial. No es necesario que sea roja ni que tenga corazones, pero sí que sea muy suave y agradable al tacto. Tejidos de lino o algodón son perfectos para ello, al ideal que colores suaves . Una manta sobre la cama y unos cojines darán un ambiente cálido al dormitorio.

Pero si lo que queremos es un efecto muy sensual, nada como la seda o el satén. En ese caso, se puede apostar por una ropa de cama de colores más atrevidos, como el negro o el rojo. Lo que siempre debemos tener muy en cuenta es que la ropa de cama combine a la perfección con el resto de la decoración elegida para el dormitorio.

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