Los precios no dan tregua. Repostar el coche vuelve a ser una ruina y los conductores lo notan semana tras semana. Aunque las cifras oficiales hablan de una ligera bajada en octubre, llenar el depósito sigue costando más que hace un año. El golpe es directo al bolsillo y, por lo que se ve, no tiene intención de aflojar.
Mientras tanto, los precios de la gasolina y el diésel siguen marcando diferencias entre ciudades y gasolineras. Un caos de cifras que refleja la falta de control real sobre el mercado y que deja a los conductores a merced de impuestos, costes logísticos y decisiones políticas.
Precios actuales del combustible en España
Según los últimos datos del Ministerio para la Transición Ecológica, la gasolina 95 ronda los 1,46€ por litro, y la 98 llega a 1,63€. El gasóleo se mantiene en torno a 1,40€, una leve bajada del 0,13% respecto a la semana anterior, pero insuficiente para notarlo al pagar.
Por zonas, los precios cambian bastante:
- Madrid: gasolina 95 entre 1,299€ y 1,709€
- Barcelona: de 1,265€ a 1,619€
- Valencia: entre 1,265€ y 1,589€
- Granada: de 1,319€ a 1,529€
En gasóleo, las diferencias también son amplias:
- Madrid: entre 1,239€ y 1,669€
- Barcelona: de 1,185€ a 1,489€
- Valencia: entre 1,185€ y 1,554€
- Granada: de 1,267€ a 1,469€
Estas variaciones responden tanto a los márgenes de las estaciones como a impuestos autonómicos y costes de transporte. El resultado: repostar cuesta casi lo mismo que hace meses, pese a los anuncios de “moderación”.
Gasolina a 2 euros el litro: un escenario más cerca de lo que parece
Aunque la gasolina se ha estabilizado en torno a los 1,60€, los expertos advierten que podría volver a subir. Y no por el petróleo, sino por Bruselas. La Unión Europea activará en 2027 un nuevo sistema de derechos de emisión que obligará a las petroleras a pagar por el CO₂ que generan sus productos.
Ese coste entre 48 y 122 € por tonelada terminará en el surtidor. Traducido: el litro de gasolina podría encarecerse entre 25 y 40 céntimos antes de 2030, acercándose peligrosamente a los 2 € por litro. Llenar un depósito medio pasaría a costar entre 72 y 85 €, unos 15 € más que hoy.
A esto se suma que más del 40% del precio actual son impuestos. El Impuesto Especial de Hidrocarburos y el IVA hacen imposible que el consumidor note las bajadas reales del crudo. Si el precio baja en los mercados, el surtidor apenas se mueve.
¿Por qué sube la gasolina en España?
El petróleo Brent supera los 90 $ por barril, empujado por recortes de producción de la OPEP+ y tensiones en Oriente Medio. A eso se suma la debilidad del euro frente al dólar, que encarece la factura energética para toda la zona euro.
Además, tras el verano, aumenta la demanda de transporte por carretera, lo que presiona aún más los precios. Y aunque el Gobierno presume de “transición energética justa”, los consumidores siguen pagando la factura más cara en años.
La gasolina 95 es la más usada por su equilibrio entre coste y rendimiento. La 98 mejora la combustión en motores potentes, pero no aporta beneficios reales en coches normales. La diferencia de precio ronda los 17 céntimos por litro, así que usar 98 sin necesidad es literalmente tirar dinero.