El subsidio por cotización insuficiente sube a 570 euros mensuales desde enero de 2025. Es una de las ayudas más relevantes para quienes han perdido su empleo sin haber trabajado lo suficiente para cobrar el paro. La cifra crece tras la actualización del IPREM, que sirve de base para casi todas las prestaciones públicas.
Esta medida del SEPE busca reforzar la red de apoyo a los trabajadores que más sufren la inestabilidad laboral. Personas con contratos cortos, empleos de temporada o interrupciones constantes en su vida laboral, que ahora contarán con un respaldo algo mayor, aunque lejos de una solución definitiva.
Subsidio por cotización insuficiente del SEPE
El SEPE mantiene este subsidio como una especie de “plan B” para quienes no llegan a los 360 días de cotización necesarios para la prestación contributiva. En otras palabras, cubre esos huecos en los que el trabajador ha estado activo, pero no lo suficiente como para generar derecho al paro.
Desde enero de 2025, la cuantía sube a 570 euros al mes, equivalente al 80% del IPREM actualizado. Hasta diciembre eran 480, así que el incremento es notable y se nota especialmente en quienes encadenan trabajos temporales. Además, durante todo el tiempo que se cobra la ayuda se sigue cotizando a la Seguridad Social, lo que permite acumular derechos para jubilación y futuras prestaciones.
Si tienes cargas familiares, bastará con haber trabajado 90 días; si no las tienes, se exigen al menos 180. El sistema intenta así ajustar la protección a la situación personal de cada demandante.
Requisitos para recibir la ayuda de desempleo
Para acceder a este subsidio de desempleo, hay que cumplir con algunos requisitos básicos. Lo primero, estar en situación legal de desempleo, es decir, haber perdido el trabajo por causas ajenas a tu voluntad. También es obligatorio inscribirse como demandante de empleo y mantener la renovación activa.
Otro punto clave es el límite de ingresos: no se puede superar el 75% del salario mínimo interprofesional al mes. Además, solo se concede a quienes hayan cotizado entre 90 y 359 días y no estén recibiendo otro tipo de ayuda incompatible.
El SEPE revisa cada caso y prioriza a las personas con menos recursos o con responsabilidades familiares. Es un proceso algo lento, pero sigue siendo una de las pocas vías de ingreso para quienes no alcanzan el paro.
Duración del subsidio y cotización
La duración depende directamente del tiempo trabajado antes de quedarse en paro. Quienes hayan cotizado entre tres y cinco meses podrán cobrar tres meses de subsidio; quienes lleguen a seis o más, accederán a seis meses de ayuda. En el caso de tener cargas familiares, el periodo puede ampliarse hasta un máximo de 21 meses.
Durante ese tiempo, el beneficiario se mantiene dado de alta en la Seguridad Social, lo que significa que sigue cotizando, algo que a menudo pasa desapercibido pero resulta fundamental para futuras pensiones y prestaciones.
Cómo se solicita la prestación por cotización insuficiente del SEPE
El subsidio puede pedirse de tres formas: por internet, a través de la sede electrónica del SEPE; de forma presencial, con cita previa; o enviando la documentación por correo administrativo. Cada una tiene sus ventajas, aunque la vía online suele ser la más rápida. El plazo para presentar la solicitud es de 15 días hábiles desde el fin del contrato.
El pago se realiza a mes vencido, ingresándose directamente en la cuenta del solicitante. Si al terminar el periodo sigues sin empleo y cumples las condiciones, el subsidio puede renovarse.
En resumen, el subsidio de 570 euros por cotización insuficiente se consolida en 2025 como una ayuda básica dentro del calendario del desempleo en España. No soluciona la precariedad, pero sí ofrece un pequeño colchón económico para quienes viven atrapados entre contratos temporales y largas esperas al borde del paro.