El camu-camu es un fruto muy poco conocido en Europa, y es algo normal, porque proviene de un arbusto originario de la Amazonia peruana. Sin embargo, conviene conocerlo, porque aporta muchos beneficios a la salud, tantos que se considera un superalimento.
Esta fruta tiene el tamaño de una uva grande, piel púrpura y carne amarilla; pero muchas veces se consume en polvo, en un refresco, en forma de helado o de yogur… En este artículo nos centraremos en sus beneficios, en base a los cuales se cataloga al camu-camu como un superalimento.
El origen del camu-camu
Como hemos explicado en la introducción, este fruto tan particular proviene de la Amazonia de Perú, y es muy apreciado en el mercado internacional (sobre todo por Japón). Sin embargo, también crece en otras regiones de América Latina, como: Bolivia, Colombia, Brasil, etc. y se desarrolla en forma silvestre en suelos que se inundan tras una época de lluvias. Lo que sí es cierto es que la tradición del cultivo del arbusto del camu-camu arrancó en Perú.
Esta planta es capaz de adaptarse a distintas condiciones agroecológicas, pero el clima ideal para que pueda crecer y dar sus frutos es el tropical, es decir, caluroso y húmedo al mismo tiempo. De hecho, lo hace de manera natural en las orillas de los ríos de la Amazonia. Es un producto muy exótico en el mercado internacional, pero para el mercado latinoamericano realmente es una fruta como cualquier otra. Sin embargo, pocos conocen sus increíbles beneficios, los cuales analizaremos en el siguiente apartado.
Propiedades y beneficios de este fruto tropical
El camu-camu destaca sobre todo por su extraordinario contenido en vitamina C, pues aporta nada más y nada menos que 2.145 miligramos por cada 100 gramos. Ningún alimento tiene mayores cantidades de vitamina C que este fruto peruano. Además, contiene una gran cantidad de aminoácidos esenciales y es fuente de otros minerales que ayudan al organismo a funcionar mejor, como el hierro o el calcio. Esta riqueza nutritiva y antioxidante convierte a esta fruta tropical en un alimento que aporta muchos beneficios, entre los que destacan los siguientes:
- Fortalece el sistema inmunitario: al contener tan elevadas cantidades de vitamina C, mejora las defensas y, además, aporta energía y buen humor.
- Cuida las mucosas y las encías: su capacidad antioxidante y antiviral (no la olvidemos) ayuda a prevenir infecciones e inflamaciones en estas zonas del cuerpo.
- Mejora la salud ocular: también gracias a que es una fuente de vitamina C y de aminoácidos esenciales.
- Protege el hígado: su alto contenido en antioxidantes, entre otras cosas, ayuda a prevenir y curar enfermedades hepáticas, sobre todo la cirrosis.
- Combate el envejecimiento prematuro: su poder antioxidante es tal que hace verdadero frente a la oxidación celular. Además, combate la inflamación, que es uno de los factores más influyentes en el envejecimiento de las células y del dolor crónico.
- Cicatriza las heridas: volvemos a hacer mención a su alto contenido en vitamina C, pero es algo normal, teniendo en cuenta que es el alimento con mayores cantidades de este compuesto del mundo. Ésta es importante para el crecimiento y el desarrollo de tejidos, lo que significa que el camu-camu también ayuda en la cicatrización de las heridas.