Los cojines son un elemento decorativo muy importante. En el caso del sofá, sirven no solo para sentirnos más cómodos cuando no sentamos en él, también para darle relevancia en el salón o, al contrario, para disimular cuando su estilo ya no es el que más nos gusta o la tapicería está algo desgastada.
Pero es habitual cometer dos grandes errores. El primero de ellos es no elegir bien esos cojines que, al fin y al cabo, será lo que más se vea en el sofá e incluso en el salón. El segundo error es colocarlos de cualquier manera, como si no importara. En decoración, cualquier detalle cuenta, por eso hay que prestar atención a todo aquello que se coloca en el sofá. ¿Tienes dudas? Aquí están las claves para acertar.
Qué tipo de cojines son mejores para decorar el sofá
Lo primero que hay que tener en cuenta, evidentemente, son las dimensiones del sofá. No conviene abarrotarlo de cojines porque entonces resultará incómodo y a nivel decorativo hasta agobiante. ¿Cuál es el número más adecuado? Por lo general, el consejo es poner uno más que el número de plazas, nunca más de esa cantidad.
Con otros aspectos como el tamaño, la forma, las texturas o los colores y estampados puedes jugar. Combinar cojines de diferentes formas aportará dinamismo al sofá. También puedes mezclar lisos y estampados, teniendo siempre cuidado en elegirlos con algún color en común que sirva de guía cromática. Por supuesto, también se pueden mezclar diferentes tipos de telas.
Cómo colocar los cojines en el sofá
Con los aspectos más importantes ya aclarados, el siguiente paso es aprender a colocarlos en el sofá como haría un profesional. Y en ese aspecto hay posibilidades muy diferentes, según el tipo de sofá y el efecto que se quiera conseguir con ello. El consejo básico es empezar siempre a colocarlos por los lados, los más grandes detrás y, si el sofá no tiene brazos, no poner cojines en los extremos. A partir de ahí hay diferentes combinaciones:
- En sofás de pequeñas dimensiones, si lo que se busca es un efecto equilibrado, lo ideal el colocar los cojines de forma simétrica, uno a cada lado.
- Se puede romper la simetría en esos sofás de dos plazas para crear una imagen más informal. En ese caso, lo que se debe hacer es colocar dos cojines en un lado y uno en otro. Y mucho mejor si son diferentes.
- En sofás en los que se coloca un plaid en un lado o en chaise longue, los cojines deben colocarse en un lado para compensar la composición.
- Cuando el sofá es grande y la decoración clásica, la forma de colocar los cojines es simétrica: dos en cada lado y uno en el centro.
- Una forma diferente, más sencilla y discreta para colocar cojines en sofás grandes es poner solo uno en cada extremo y uno más pequeño y de diferente forma y tapicería en el centro.
- Los cojines agrupados en el centro del sofá solo se deben colocar en dos situaciones: sofás muy pequeños o sin brazos.
- En sofás muy, muy grandes, lo más decorativo es colocar cojines en todo el respaldo. Se puede jugar con formas, tamaños y texturas para dar un toque de dinamismo a la composición. Esta idea es más adecuada en esos sofás con respaldo algo más bajo. También puedes colocar tres y tres en cada brazo.
Estas son las mejores formas de colocar los cojines en el sofá para crear un efecto decorativo. Recuerda que, cuando vas a colocar varios, la forma de dar un toque diferente a las composiciones es introduciendo algún elemento diferenciador, que puede ser el tamaño, la forma, el color o la textura. También puedes jugar con elementos decorativos como flecos, volantes o borlas.
Un consejo extra: integrar los cojines en la decoración
A la hora de colocar cojines en el sofá no solo hay que tener en cuenta cómo es este. También hay que pensar en el resto de la decoración del salón. Los cojines deben combinar con la tapicería del sofá, pero también con el estilo y los colores dominantes en la estancia. ¿Quiere decir que tienen que ser del mismo tono? No, es más, siempre es interesante crear algún tipo de contraste, pero guardando un equilibrio y con colores y texturas que combinen bien.
La ventaja, por otra parte, es que además puedes darle un toque diferente al salón en cada estación de una forma tan sencilla y barata como cambiando las fundas de los cojines. En verano, opta por tejidos frescos como el algodón y estampados florales. En invierno, algún cojín con pelo y telas lisas, quedarán perfectos en ese sofá.