No se trata ni de un capricho ni de una locura. Llevar el arte hasta espacios tan poco habituales para ello como el cuarto de baño está de moda. Evidentemente, no todo sirve. Sin embargo, es una buena manera de reinventar la decoración de la estancia de una manera muy sencilla. Al fin y al cabo, en muchos casos lo que tenemos son paredes que son el mejor lienzo en blanco para colocar pequeñas o grandes obras de arte.
Llevar el arte al cuarto de baño tiene además una función mucho más que decorativa. Con ello conseguiremos dar personalidad propia a ese baño, adaptarlo a nuestros gustos y conseguir que nos encontremos realmente a gusto en él. No se trata de trasnformar sus paredes en las de un museo, pero sí de darle un toque diferente y muy, muy atractivo.
Fotografías y láminas para el cuarto de baño
Es posible poner óleos en el cuarto de baño y, de hecho, el efecto es muy atractivo. Sin embargo, las condiciones de humedad del baño pueden dañarlos, salvo que se protejan a la perfección. Fotografías, láminas y grabados son una buena alternativa porque resulta más sencillo protegerlas de la humedad con marcos estancos.
Como puedes imaginar, el tipo de piezas que podemos colocar es de lo más variado. Las hay para todos los tipos de baño, para todos los estilos y para todos los gustos. Pero con tantas posibilidades para elegir, ¿Cómo no equivocarse? Estas son algunas ideas para dar vida a las paredes del baño de una manera elegante y sencilla.
Figuras humanas en el cuarto de baño
Retratos y posados son perfectos para un cuarto de baño en el que se busque la elegancia y la exquisitez. Fotografías en blanco y negro son, en ese sentido, perfectas, sobre todo para la pared de la bañera. Mejor con marcos sencillos, que no resten protagonismo a la imagen.
Formas geométricas o abstractas
Son ideales para introducir el color en un baño blanco. Cualquier motivo es válido, pero siempre hay que intentar que haya un cierto equilibrio cromático con los colores de otros elementos como accesorios o textiles. Es cierto que los contrastes funcionan, pero el baño es un espacio reducido y si son demasiado pronunciados el resultado puede ser agobiante.
Motivos florales o vegetales
Más o menos sencillos o coloridos, tienen la ventaja de que encajan bien en estilos muy diferentes: romántico, tropical, clásico, shabby, escandinavo, oriental… Si optas por este tipo de cuadros, un collage con diferentes piezas incluso de diferente tamaño quedará genial y servirá de punto focal en un baño demasiado soso.
Pósteres y fotomurales
Es una forma diferente de decorar el baño. Si es grande, elige un póster de gran formato y con mucha fuerza o, mucho mejor, un fotomural. ¿Imaginas darte un baño contemplando una playa maravillosa o un bosque tropical? Si el baño es pequeño, mejor una pieza que sea menos llamativa. ¿Puedes poner más de un póster? Sí, pero ten en cuenta el tamaño y el espacio disponible en las paredes.
Cómo y dónde colocar los cuadros en el baño
Ya te hemos adelantado algunas ideas, por ejemplo, decorando la pared de la bañera. Pero también puedes colocarlos en la opuesta al espejo, de modo que el efecto será mucho mayor. En esa pared que hay sobre el inodoro y a la que tan poca importancia damos o decorando los laterales del lavabo son otras posibilidades. Lo importante es que la composición sea equilibrada y que su tamaño sea proporcional al del baño.
Alternativas a cuadros y fotos para llevar el arte al cuarto de baño
Cuadros, láminas o fotomurales tienen la ventaja de que visten mucho y se cuelgan en un momento. Pero si quieres llevar a tu baño otras formas artísticas, no te quedes en ellos. Hay alternativas maravillosas, aunque en algunos casos será necesario hacer obras. Por ejemplo, los mosaicos. Puedes decorar la pared del espejo con uno lleno de colorido y tendrás un baño de revista.
Pero no solo en la pared del lavabo. Los mosaicos quedan espectaculares para revestir las paredes de la ducha. El espacio es mucho más amplio, lo que permite hacer diseños maravillosos, tanto abstractos como realistas. Además, en ellos se pueden combinar no solo piezas cerámicas, también cristal o incluso piedras, con lo que podrás dar a tu baño un estilo muy personal y, sobre todo, único.
Y, si no quieres hacer obras, la alternativa es la pintura sobre azulejos. Ya te hemos dicho que el baño es perfecto para introducir el arte porque sus paredes son un lienzo en blanco. Utilízalas como tal, en el sentido más estricto de la palabra. Si no eres bueno con los pinceles o no te atreves, un pintor profesional podrá hacer auténticas maravillas y tendrás un cuarto de baño único e irrepetible.