El dormitorio de los más pequeños es su universo particular. En muchos casos no es solo ese lugar donde descansan y se sienten seguros. Es también ese espacio propio donde juegan y donde desarrollan su imaginación. Por eso es importante diseñarlo de una manera que favorezca su creatividad y que permita que den rienda suelta a su ingenio.
Cada niño es un mundo. Su edad, sus gustos, su personalidad o incluso sus intereses cuando ya son algo mayores nos dan muchas pistas de cómo crear ese espacio en el que pueden sentirse ellos mismos. Pero también podemos poner mucho de nuestra parte para conseguir que el dormitorio sea muy especial. No es necesario que sea muy grande, solo hace falta un poco de inventiva.
Un dormitorio con paredes divertidas
La forma más sencilla de decorar de una manera diferente el dormitorio de nuestros hijos es dar un toque personal a las paredes. Y hay mil formas de conseguirlo. ¿Lo más sencillo? Los vinilos. Con ellos puedes transformar una pared blanca en una selva, en un mundo de fantasía o en el universo.
Busca, eso sí, motivos adecuados a la edad de los niños. Y, mucho mejor si son en colores suaves, no hay que olvidar que no hablamos de cuarto de juegos, sino de dormitorio y que por ello debemos favorecer el descanso. Si la decoración tiene colores muy intensos, los niños se excitarán y puede que les cueste dormir.
Hay alternativas a los vinilos. Por ejemplo, una pared de pizarra. Son perfectas para que los peques puedan desarrollar sin límites sus dotes artísticas. Y, lo que es más importante, sin estropear absolutamente nada. ¿Te preocupa la suciedad? Olvídalo, hay tizas antipolvo que se limpian con gran facilidad y no dejan residuos.
Un rincón para la imaginación en el cuarto de tus niños
No necesitas mucho espacio para colocar un tipi en el dormitorio de los niños. Y es una buena idea para fomentar su imaginación. Se sentirán como auténticos aventureros. Además, hay mil modelos diferentes para elegir, tanto en formas como en tamaños o en colores.
Pero no se trata de colocar ese tipi sin más. Atrévete a diseñar un rincón realmente especial con una alfombra mullida y unas guirnaldas de luces alrededor. Y, si quieres que se convierta en el lugar preferido de tus hijos, coloca cerca una pequeña repisa con libros y cuentos que les inviten a imaginar mundos fantásticos.
Un gimnasio para niños pequeños en el dormitorio
Los niños son pura vitalidad y el movimiento es imprescindible para su desarrollo. Si hace buen tiempo, no hay nada como salir al parque o al campo a correr, montar en bici o disfrutar con los amigos. ¿Pero cómo quemar tanta energía cuando llueve o hace frío? No necesitas mucho para montar un minigimnasio en su dormitorio. Además, puede ser de lo más decorativo.
Hay muchas ideas diferentes para darle forma, desde colocar espalderas en la pared y unas colchonetas en el suelo a diseñar un pequeño rocódromo en un rincón con piezas de diferentes formas y tamaños. También puedes colgar unas anillas del techo o incluso un pequeño saco de boxeo si los hijos son algo mayores. Si esos elementos son del color del mobiliario o combinan con él se integrarán sin problemas en la decoración del dormitorio.
También un parque infantil
Sobre todo cuando los niños son más pequeños, es interesante crear una zona en la que puedan relajarse o jugar con calma. Algo tan sencillo como un pequeño columpio o una hamaca adaptados a su tamaño les encantará. Ocupan muy poco son muy decorativos. Especialmente las hamacas son muy prácticas, ya que puedes usarlas como espacio de almacenaje cuando no se utilicen y dejar en ellas, por ejemplo, sus peluches preferidos.
Un aspecto muy importante es la seguridad. Tanto si colocas un columpio como si es una espaldera o cualquier otro accesorio en el que los niños se puedan subir, asegúrate de que la superficie que hay debajo amortigua los golpes ante una caída accidental. Las alfombras mullidas son una posibilidad, pero mejor si son de goma espuma. Además de blanditas se limpian con mucha facilidad y las hay muy divertidas que se montan y desmontan en piezas en forma de puzles.
Textiles que dan mucho juego
El toque definitivo puedes conseguirlo con los textiles. Y nos referimos no solo a edredones o colchas, también a alfombras que son circuitos de carreras, a cojines con divertidas formas de animales o a mantas que pueden tirar en el suelo para jugar tranquilamente. Los textiles son los que darán un toque de calidez al dormitorio, pero con ellos puedes crear esos mundos de fantasía si realmente no tienes espacios para crear un pequeño rincón de juegos.