El comedor es la habitación perfecta para compartir en familia y amigos, el lugar idóneo donde acoger a tus invitados, utilizarlo para trabajar, descansar tras un largo día o servir una buena comida. Por ello, debe ser un ambiente acogedor, relajante y elegante. En el tipo de casas actual, es muy habitual que comparta espacio con el salón, así se favorecen los espacios abiertos y la comunicación entre las diferentes zonas. Es por ello que debes valorar siempre cualquier cambio en el comedor, pues influirá en la sensación del salón y viceversa. Lo mas recomendable es que visualices todo como un conjunto, pues te permitirá tomar decisiones que tengan coherencia.
El comedor, generalmente unido al salón de la casa, no sólo es un espacio polivalente donde lo mismo se puede comer que trabajar, sino que es el mejor escaparate para mostrar nuestro estilo en decoración. Hace unos días hablábamos de los auténticos reyes de los salones, las sillas y las mesas, pero no son los únicos elementos clave de estas estancias en las que el comedor está incluido. Hay algunos más y vamos a profundizar en ellos.
Elementos principales de un salón – comedor
Si bien es cierto que la decoración es importante, un buen punto de partida para contar con el salón- comedor que siempre deseaste es considerar el entorno, es decir, echar un vistazo a las paredes y otras superficies, pues quizá necesiten una renovación, ya sea con una capa de pintura, un abrillantado o un papel pintado de los que están en tendencia. Una gran idea es empapelar una de las paredes, eligiendo un papel pintado llamativo y especial. Si este es vinílico, será mucho más fácil de limpiar en caso de que se produzca alguna mancha.
Entrando ya en el mobiliario, elegir materiales naturales para los muebles y elementos decorativos es una excelente opción que elevará la decoración del comedor a cotas muy altas. Madera, fibras vegetales, textiles naturales, etc. La textura y apariencia de estos materiales, además de aumentar el confort, dotan al espacio de la elegancia de lo esencial. Tenlo en cuenta si tienes que cambiar algún mueble, ya se trate de la mesa de comedor o de un elemento auxiliar.
Y es que en un salón- comedor no puede faltar una buena mesa y, a la hora de escoger el tamaño y diseño de la misma, han de tenerse en cuenta dos aspectos fundamentales: las dimensiones del espacio con el que se cuenta y la utilidad que se le va a dar. Ya se sabe que, en comedores reducidos es mejor optar por modelos redondos u ovalados, pues ayudan a crear un espacio más ligero. En espacios amplios, mejor mesas rectangulares extralargas que sean protagonistas indiscutibles de la escena. Las de tablones y madera lavada, o reciclada, son las que más éxito están teniendo últimamente.
En cuanto a las sillas, las opciones son múltiples. Puedes colocar en tu comedor sillas iguales o combinar varios estilos, dependiendo de lo que busques. Para un comedor formal y atemporal, mejor asientos iguales que pueden variar de color; pero si buscas un golpe de efecto y más naturalidad en la composición, te recomendamos elegir modelos de sillas diferentes, aunque con un denominador común, ya sean los materiales, los colores, la antigüedad…, eso sí, debes tratar de que las sillas tengan dimensiones similares, aunque difieran en el diseño. De esta manera establecemos un orden visual que resulta agradable. Si decides tapizarlas, busca dibujos o una paleta cromática que sintonice con el resto de la casa.
Otro elemento muy importante es la iluminación, y las lámparas de techo centradas, con una altura que no interrumpa la visibilidad entre comensales (a unos 80 cm de la mesa), son la solución más práctica, aunque puede sustituirse por focos empotrados si el comedor es pequeño y el techo es bajo. Por el contrario, si este es amplio puedes complementar la luz sobre la mesa con apliques de pared u otras fuentes de iluminación, pues contar con varias fuentes de luz hace que es espacio sea más acogedor. Según los profesionales, una iluminación cálida pero sin intensidad para crear climas íntimos sería lo ideal.
En este punto, si todavía no tienes muy claro dónde colocar el comedor en tu casa, o si quieres cambiarlo de ubicación porque su emplazamiento actual no funciona, busca uno cerca de una ventana. Los expertos aseguran que esto te permitirá dotar al comedor de luz natural, lo que hará las comidas y las cenas mucho más agradables. Por otro lado, si tu ventana tiene buenas vistas, permitirá a los comensales disfrutar de ella, «sumando puntos» a la velada.
Finalmente, otro aspecto que no debe olvidarse es el confort. Por mucho que quieras un comedor elegante y glamouroso, sacrificar por ello la comodidad no es una opción. No hay nada comparable a una larga sobremesa con las personas que queremos, pero para poder disfrutar de ella es imprescindible que todos estén cómodos. En este sentido los asientos son el elemento esencial a tener en cuenta. En el caso de que tu comedor sea pequeño puede que te resulte práctico colocar un banco en uno de los laterales de la mesa, ya que ofrecen varios asientos y ocupan menos. Si lo haces, no olvides equiparlo con una colchoneta o con cojines.
Como colofón para tu salón- comedor, una pieza única y especial conseguirá darle esa personalidad que buscas. Una cómoda de herencia, un aparador procedente de un mercadillo, una mesilla de noche de una almoneda convertida en mesita auxiliar, un armario ropero restaurado, etc. No son piezas fáciles de encontrar pero, si tienes la suerte de tener algunas, colocarlas en el comedor será una idea fantástica para elevar la decoración.