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Transforma tu baño con el espejo perfecto: Guía para elegir el espejo que tu cuarto de baño necesita para estar a la moda

Tamaño de la estancia, luminosidad y estilo son los criterios básicos para acertar

El espejo es uno de los elementos más importantes de cualquier cuarto de baño. Y no solo porque sea imprescindible para el aseo personal, también porque es parte fundamental de la decoración. Un espejo puede hacer que la estancia parezca más grande y más luminosa. Y, por supuesto, está sujeto a modas y tendencias.

A la hora de elegir el mejor espejo para el cuarto de baño hay que tener en cuenta las características de la estancia, sus dimensiones, quién va a utilizar ese espejo y, por supuesto, que estilo queremos dar al baño. Solo así conseguiremos ese efecto decorativo, funcional y práctico. Vamos a ver algunas claves para acertar.

Tamaños, formas y estilos: cómo elegir el espejo del baño

La variedad de modelos es casi infinita, y eso facilita mucho la tarea de elegir el espejo perfecto para el cuarto de baño. De momento, adelantamos que en 2023 hay una tendencia que se impone en lo que a este accesorio se refiere: se llevan los espejos redondos. Son muy versátiles y se adaptan bien a todos los estilos decorativos.

Bano con espejo de pared

Dejando a un lado las modas, en lo primero en lo que hay que fijarse es en el tamaño del cuarto de baño. En un baño pequeño, mejor espejo grande. Potenciará la luz y, con ello, visualmente la estancia parecerá mucho mayor. Lo ideal es un espejo que ocupe la pared del lavabo desde la encimera hasta el techo. En su defecto, mejor espejos de formas rectangulares o cuadradas y, a ser posible, sin marco.

En baños de reducidas dimensiones, el espejo puede hacer mucho más, puede aportar un espacio de almacenaje precioso. Espejos con puertas que ocultan baldas o pequeños armarios son perfectos para guardar esos productos o útiles de aseo diario. Así se tienen siempre a mano, ocultos a la vista y, lo que es más importante, liberando encimeras y muebles bajolavabo.

Si el baño es grande, las posibilidades son mucho mayores. Se puede jugar con tamaños, formas y marcos. En cualquier caso, el tamaño de ese espejo debe ir en consonancia con el del baño. Si hay dos lavabos, siempre se puede elegir entre una sola pieza de mayor tamaño o dos a juego. En este último caso, el estilo del espejo dependerá del del baño.

Los espejos redondos u ovalados aportan dinamismo y elegancia a las estancias, mientras que los que son asimétricos dan una sensación de modernidad y son perfectos para cuartos de baño juveniles. Formas cuadradas o rectangulares encajan bien en cualquier estilo, sobre todo en los más sobrios, clásicos o minimalistas.

Otra cuestión importante: si nos parece un baño “soso”, marcos anchos o con cierta presencia, pueden darle ese toque de distinción que buscamos. La madera aporta calidez, mientras que los metales crean espacios sofisticados y de aires industriales si el marco es negro. Si es dorado o en cobre, será perfecto para dar un ambiente vintage al baño. Si el marco es metálico, grifería y perfiles en el mismo color resultan muy atractivos.

En el sentido contrario, podemos hacer que el espejo pierda presencia para resaltar otros elementos del baño o para hacer que visualmente sea menos pesado. En ese sentido, hay dos posibilidades. La primera, elegir un espejos sin marco, simplemente biselado. La segunda, un espejo con el marco en el mismo color que el azulejo. Cualquiera de las dos posibilidades es perfecta en baños de estilo minimalista.

Espejos multifunción: prácticos y decorativos

Ya hemos mencionado una de esas funciones “extra” que pueden tener los baños: el almacenaje. Pero no necesariamente tiene que ser ocultando un armario. Hay espejos con baldas muy prácticos. Pero hay que tener en cuenta que esas estanterías implican un peso visual que no encaja bien en cuartos de baño pequeños. No solo eso, obligan a tener siempre perfectamente organizado lo que dejemos sobre ellas.

Cuando lo que se busca, además de estilo es funcionalidad, debemos optar por otro tipo de espejos. Los más comunes son los que llevan iluminación o retroiluminación, geniales para esos cuartos de baño más oscuros o de menor tamaño, puesto que aportan sensación de profundidad. Eso sí, nunca deben ser la única fuente de iluminación de la estancia.

Para los más presumidos, esos que necesitan tener una buena visión a la hora de asearse, hay diferentes alternativas, desde espejos con laterales móviles a esos otros que llevan lentes de aumento incorporadas. Y, para los más comodones, hay espejos que incluso incorporan funciones avanzadas para, por ejemplo, encenderse con la voz o escuchar música a través de altavoces incorporados.

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