Loading...

Los errores en la decoración del baño que debes evitar

Estos errores son bastante comunes, así que conviene conocerlos para que no los cometas.

Errores decoración baño

Decorar un baño tiene sus secretos, no siempre es fácil, especialmente si tenemos en cuenta que en muchas ocasiones son estancias pequeñas y oscuras. A veces nos damos cuenta demasiado tarde de que esas ideas de decoración que creíamos que iban a funcionar, realmente no lo hacen y nuestro baño o es, ni de lejos, como lo habíamos imaginado.

Por ello, antes de comprar mobiliario y accesorios o de realizar una reforma, es importante conocer algunos de los fallos más comunes que se comenten en los baños. Vas a ver como en muchos casos solo tienes que aplicar la lógica y no apresurarte en tomar decisiones. Ten en cuenta que si caes en ellos no siempre será sencillo arreglarlos.

No pensar en la distribución del baño

Si tienes en mente reformar el baño, es importante que te olvides de la distribución que tiene ahora. ¿Quiere decir que sí o sí hay que cambiarla? En absoluto. Pero siempre viene bien echar un vistazo con ojo crítico. Analizar con calma si hay alguna otra forma de colocar los sanitarios para ganar algo de espacio y conseguir que el baño sea más cómodo y funcional a veces tiene resultados sorprendentes.

Baño con mala distribución
Una mala distribución dificulta el movimiento en el baño

¿Cómo acertar con esa distribución? Hay algunos consejos que nunca fallan. El primero es alinear las piezas para facilitar la movilidad en la estancia y optimizar el espacio. El segundo, colocar siempre las piezas más voluminosas al fondo para dar mayor amplitud visual a la estancia. Estos consejos son especialmente útiles si el baño es pequeño.

No fijarse en las proporciones

Quién no sueña con un mueble maravilloso, amplio y con capacidad de almacenamiento suficiente para guardar un montón de enseres. Pero no siempre es la mejor elección para el baño. Uno de los errores frecuentes es elegir el mobiliario sin tener en cuenta las dimensiones de la estancia.

Los muebles deben guardar siempre proporción con las dimensiones del cuarto. Un mueble de lavabo demasiado grande hará que el baño sea agobiante. Si necesitamos espacio para guardar cosas, siempre cabe la posibilidad de colocar un espejo con estanterías ocultas, alguna balda o un carrito. Y, al contrario, un mueble demasiado pequeño, estéticamente nunca resultará atractivo.

Elegir mal el espejo

Junto al mueble del lavabo, el espejo es uno de los grandes protagonistas del baño. Por eso hay que elegirlo con mucho cuidado. En baños pequeños u oscuros, siempre es mejor colocar espejos grandes que multiplican la luz y hacen que los espacios se vean más amplios. Si el baño es grande, no será necesario y se puede jugar con piezas pequeñas más decorativas.

Equivocarse en el tamaño del espejo del baño es un error común

Y otro error frecuente en el baño que tiene que ver con el espejo es la altura a la que se coloca. Ni muy alto ni muy bajo. Si ponemos el espejo demasiado alto, no nos veremos bien y para los más pequeños será un inconveniente. Pero si lo colocamos demasiado bajo, las salpicaduras harán que se oxide y se deteriore en poco tiempo. ¿Cuál es la altura ideal? Debe estar a unos 30 cm de la encimera.

Iluminar mal las diferentes zonas

En un cuarto de baño, la iluminación es fundamental. Si no acertamos con ella pasarán dos cosas. La primera, que el baño no resultará acogedor, será frío y cualquier intento decorativo se verá arruinado. La segunda, que no tendremos una buena visibilidad a la hora de asearnos o arreglarnos.

Por eso, hay que elegir muy bien donde colocar los puntos de luz. Es imprescindible que haya uno en el techo que ofrezca una iluminación general. También en el espejo, preferiblemente a ambos lados para que no haya sombras y a la altura del rostro, pero sin que sea molesto. Pero lo ideal es colocar un espejo retroiluminado. Y un aspecto que se suele olvidar: la iluminación ambiental. Conseguirla es fácil con tiras LED que ofrezcan una luz cálida.

Equivocarse con los colores

Un baño no necesariamente tiene que ser blanco, pero los colores intensos, por lo general, no encajan bien en esta estancia. Es posible introducir notas de color en muebles o accesorios, pero siempre con moderación. No debemos olvidar que el baño, cada vez más, es un espacio para relajarse y que los colores demasiado fuertes no invitan precisamente a ello. Sí quedan bien en él beiges, grises claros o tonos pastel, sobre todo si son baños pequeños.

Mala selección colores baños errores

No dar importancia a las puertas

A veces nos fijamos en los revestimientos, en los sanitarios o en el mueble del baño, pero nos olvidamos de las puertas. ¿Por qué son tan importantes? Porque pueden hacer que ganemos espacio en la estancia o al contrario. No debemos olvidar que las puertas batientes necesitan hueco suficiente para poder abrirse y que también condicionan la distribución de los diferentes elementos del baño. Eso no ocurre con las correderas, así que si vas a reformar el baño, debes tenerlo en cuenta.

Salir de la versión móvil