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Hogares sostenibles donde la salud es lo primero

El biointeriorismo logra un entorno muy beneficioso para los habitantes de la vivienda

Disfrutar hoy en día de un hogar saludable, funcional y de diseño está al alcance de todos, ya que la tecnología y los materiales actuales nos permiten conjugar diseño, sostenibilidad y salud. Esta unión se traduce en un hogar beneficioso para la salud y en una relación más amable con el medio ambiente. Hoy, más que nunca, nuestros hogares han de ser ese refugio que nos permite apartarnos del estrés del día a día, de las preocupaciones y de todo aquello que, de una u otra manera, interfiere en nuestro bienestar.

Desde hace algún tiempo, en el terreno de la decoración de interiores se está imponiendo una nueva tendencia que tiene como finalidad favorecer esa tranquilidad y equilibrio tan necesarios con tan solo cruzar el umbral de nuestra casa. Además, apuesta por la sostenibilidad y por un planeta verde. Si bien hace más de una década se impuso la moda de incorporar la técnica milenaria del Feng-shui en la decoración, y partiendo de sus principios se buscaba facilitar el libre flujo del «chi» (energía universal) en la misma de tal manera que sus habitantes se sintieran cómodos en su interior, recientemente se ha dado un paso más en la decoración de interiores y la última tendencia es el biointeriorismo, cuyo fin es lograr un entorno saludable para los habitantes de la vivienda.

Principios del biointeriorismo

El biointeriorismo es un tipo de diseño enfocado en la salud de los habitantes de una casa. A algunos les puede sonar pintoresco, pero bien pensado, pasamos muchas horas en el interior de estas respirando el mismo ambiente constantemente. Si realmente nos ponemos a pensar sobre la cantidad de objetos que nos rodean y que tienen componentes nocivos para nosotros, como los tejidos sintéticos que no son nada beneficiosos para la salud, quizá el biointeriorismo ya no sea tan estrambótico.

salón con mesa y accesprio de madera, plantas y alfombras

Esta vertiente del interiorismo aporta aspectos relacionados con la eficacia energética, el uso de energías alternativas, la mejora de la calidad ambiental interior y una selección de materiales «bio», de tal manera que el diseño de un piso sea lo más sostenible posible, consiguiendo así espacios de diseño para gente que se cuida y cuida al medioambiente. Y es que hay estudios que ponen de manifiesto que hasta el 30% de las patologías que sufren los ciudadanos pueden estar relacionadas con la manera en que se han construido y diseñado los espacios que habitamos.

Incluso por debajo de los límites que la Organización Mundial de la Salud ha establecido como perjudiciales, se ha demostrado que nos pueden afectar. Insomnio, malestar, alergias, depresión, sistema inmunológico debilitado, etc., pueden deberse a un mala praxis en el diseño de un espacio. Por todo ello, esta tendencia parte de cinco principios básicos o aspectos que se deben tener muy presentes y, sobre todo, aplicarse.

Para empezar, el económico, pues la reforma o el diseño de interior debe tener un precio competitivo y asequible; a nivel medioambiental, ha de tener el menor impacto posible para reducir al máximo la huella ecológica; el hábitat ecosocial, que siempre debe favorecer la calidad de vida de quien la habite; el aspecto energético, debe incorporar técnicas de ahorro y eficiencia energética; y, por último, la salud ambiental interior, siendo fundamental trabajar con materiales libres de tóxicos, evitar al máximo los campos electromagnéticos que puedan generarse en el interior de un piso y aplicar técnicas de bioconstrucción.

Cómo aplicar el biointeriorismo

Existen diversas técnicas que se pueden incorporar para hacer un hogar mucho más respetuoso y favorecer al máximo el bienestar, equilibro y salud de sus inquilinos. Por un lado, para crear un espacio de biointeriorismo es conveniente rodearse de tejidos naturales, como, por ejemplo, de lana, de seda, de cáñamo, de algodón o de lino. Si tienes cortinas de baño de PVC, es el momento de retirarlas. Para el mobiliario del hogar, es recomendable apostar por materiales naturales que no hayan sido tratados, sin barnices ni colas tóxicas.

Deberían, además, respetar la biodiversidad, siendo la madera maciza un buen material a tener en cuenta. Estéticamente es muy agradable y además es resistente, cálida y duradera. Asimismo, para el acabado de los suelos o paredes, dispones de diversas alternativas naturales, como la pintura ecológica 100% natural o la propia madera. Del mismo modo podrás hacer uso de piedra o arcilla natural para ciertos acabados de tu vivienda.

Centrándonos en la iluminación, el biointeriorismo utiliza una que se asemeja el máximo posible a la luz natural, no emitiendo demasiado campo eléctrico ni residuos tóxicos y muy eficaz. Siguiendo con la pintura, hay muchas que aún emanan toxicidad, siendo recomendables las naturales como la pintura a la cal o el silicato, las cuales crean un ambiente más limpio, ya que no desprenden tóxicos. Por todo lo anterior, es importante prestar atención a los materiales con los que nos relacionamos a diario en nuestro hogar y empezar a plantear si vale la pena seguir teniéndolos o apostar por otros materiales más amigables con el medioambiente.

Finalmente, en lo relativo a los textiles, se recomienda vestir la casa con unos 100% naturales y orgánicos, sin químicos ni residuos pesticidas, saludables para humanos y par a el medio ambiente. En este punto, los expertos recomiendan poner especial atención en la ropa de cama, ya que al estar en contacto directo con la piel pueden contener tóxicos que entran en el cuerpo a través de la piel o la respiración, perjudicando los procesos biológicos que se llevan a cabo durante el descanso. En resumen, podría decirse que el biointeriorismo trata de construir espacios que sean biocompatibles, poniendo el acento en la sostenibilidad energética y la salud de sus usuarios, y basándose fundamentalmente en los cinco aspectos citados: económico, medioambiental, ecosocial, energético y de salud ambiental interior.

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