El bicarbonato de sodio es bien conocido como un agente leudante clásico que muchos usan para cocinar sus productos horneados favoritos, pero tiene muchos más usos que simplemente espolvorearlo en recetas. Actualmente, es muy popular porque funciona como un potente limpiador y desodorante en la cocina. Este ingrediente es multiusos, asequible, ecológico y no tóxico, lo que lo convierte en una excelente alternativa si deseas reducir la cantidad de limpiadores químicos en su hogar.
Como beneficio adicional, el bicarbonato de sodio para la limpieza, no deja un olor fuerte como muchos productos de limpieza. Una vez que veas qué tan bien limpia, te unirás a la lista de personas que lo compran en grandes cantidades. A veces, el bicarbonato de sodio es todo lo que necesitas para ayudar a limpiar la cocina, pero dependiendo de la superficie y de lo difíciles que sean las manchas, es posible que necesites potenciarlo mezclándolo con un ácido natural, como vinagre blanco o jugo de limón. Sique leyendo y entérate de las reacciones químicas espumosas y burbujeantes con las que puedes quitar las manchas y la grasa de tu cocina.
Formas de usar bicarbonato de sodio para limpiar la cocina
Si quieres ver cada rincón de tu cocina impecable, libre de manchas, grasa, suciedad y microbios contaminantes, debes seguir un protocolo de limpieza periódico. Los consejos que te ofrecemos a continuación te ayudarán a lograr tu cometido con éxito, sin tener que gastar dinero de más.
Limpiar el microondas
El microondas se ensucia rápidamente, pero frotarlo con bicarbonato de sodio lo dejará reluciente en poco tiempo. Espolvorea bicarbonato de sodio sobre una esponja y limpia todas las áreas dentro del microondas. Pasar nuevamente por las superficies con una esponja limpia para eliminar los restos de bicarbonato de sodio.
Desodoriza tus tablas de cortar
De vez en cuando, además de limpiar las tablas de cortar después de cada uso, es importante desodorizarlas. Espolvorea un poco de bicarbonato en polvo sobre la superficie de corte, frota con una esponja y luego enjuaga para dejarla con olor a nueva.
Mezcla para el lavavajillas
A veces, el lavavajillas necesita un esfuerzo adicional para las manchas difíciles. El bicarbonato de sodio es el ingrediente estrella. Espolvorea una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio sobre el fondo del lavavajillas y luego ejecútalo en el ciclo normal. O dale una limpieza profunda con una combinación de bicarbonato de sodio y vinagre.
Desatascar los desagües
Los desagües obstruidos pueden causar olores horribles, sin mencionar que el fregadero queda fuera de servicio. No te preocupes. Espolvorea un par de cucharadas de bicarbonato de sodio por el desagüe y vierte vinagre caliente hasta hervir (puedes calentarlo en el microondas o en la estufa). Esto provocará un chisporroteo y una reacción de espuma y, con suerte, romperá la obstrucción. Luego, deja correr agua caliente por el desagüe para enjuagar y todo debería volver a funcionar sin problemas.
Quita la grasa y las manchas difíciles de ollas y sartenes
Deshacerse de la grasa y las manchas difíciles puede resultar difícil, pero este sencillo truco simplificará el proceso de limpieza. Espolvorea bicarbonato de sodio directamente sobre ollas y sartenes grasosas. Agrega vinagre hirviendo y espera unos 30 minutos para que la mezcla actúe para aflojar las partículas y manchas de comida endurecidas. Utiliza una esponja para fregar y las manchas deberían quitarse fácil y rápidamente. Repite el proceso si es necesario. También puedes usar un método similar en bandejas para hornear. Ten cuidado si limpia específicamente utensilios de cocina de aluminio, ya que dejar el bicarbonato de sodio durante demasiado tiempo puede provocar oxidación y, por lo tanto, decoloración.
Limpiar el horno
Limpiar el horno puede parecer una gran tarea, pero combinar bicarbonato de sodio y vinagre blanco lo hará más fácil. Para empezar, crea una pasta mezclando bicarbonato de sodio y agua y luego extiéndela por el fondo y todos los lados del horno. Rocía vinagre sobre la pasta y comenzará a formar espuma. Déjalo reposar unos minutos y luego frota con una esponja o un paño de cocina. Las manchas difíciles y las partículas de comida endurecidas deberían desprenderse fácilmente. De lo contrario, rocía más vinagre hasta que sea fácil eliminar la suciedad o repita el proceso.
Reducir los olores en el frigorífico y el congelador
Este es simple y útil para mantener el refrigerador y el congelador sin olores. Coloca el bicarbonato de sodio en un frasco o recipiente de vidrio pequeño de boca ancha y colóquelo en el refrigerador y/o congelador por hasta tres meses para eliminar los olores. Si lo deseas, coloca varios recipientes en el refrigerador donde sueles almacenar los alimentos más malolientes. El bicarbonato de sodio absorberá los olores fuertes y persistentes y ayudará a mantener un olor neutro en todo el electrodoméstico.
Limpiar un fregadero de acero inoxidable
De vez en cuando, tu fregadero de acero inoxidable merece una buena limpieza para mantenerlo brillante y con buen olor. Toma un limón, córtalo por la mitad y vierte una pequeña cantidad de bicarbonato de sodio en el lado cortado de la mitad de un limón. Utiliza el limón como si fuera una esponja, frotando y limpiando el fregadero. Otra opción es hacer una pasta de bicarbonato de sodio y jugo de limón y agregar la mezcla a una esponja o paño para limpiar el fregadero.
Mantén tu estufa en las mejores condiciones
La estufa es una de esas superficies que se ensucia rápidamente cuando cocinas con frecuencia. Agita el bicarbonato de sodio sobre la estufa y luego rocíe con vinagre blanco y observe cómo burbujea y hace espuma. Déjalo reposar durante cinco minutos y luego frote suavemente con una esponja húmeda. Limpia la superficie con un paño o pásala nuevamente con una esponja limpia y notarás una diferencia brillante.