Las calderas son uno de los sistemas más utilizados para conseguir tener calefacción en nuestra vivienda debido a las múltiples ventajas que nos ofrecen frente a otros, si bien es cierto que actualmente se están convirtiendo en un auténtico quebradero de cabeza debido a la subida de precio de ciertos combustibles como el gas.
Aun así, son muchos los hogares que aún continúan funcionando con calderas y, para sacarle el máximo provecho a las mismas, debemos saber distintos aspectos de las mismas como pueden ser sus ventajas o las averías más comunes. Y es que, conocer los problemas que suelen sufrir las calderas de gas puede permitirnos detectar la solución más fácilmente para que nos afecte lo mínimo posible.
Las 5 averías más comunes en una caldera de gas
Las calderas son uno de los sistemas que nos permite proveer a nuestra vivienda de agua caliente sanitaria y también para su uso en nuestro sistema de calefacción, existiendo diversos tipos en el mercado que varían basándose en su potencia o el combustible utilizado.
En cualquier caso, y pese a su gran resistencia, en ocasiones estos dispositivos experimentan fallos de funcionamiento que pueden hacer que tengamos problemas de uso. Te explicamos cuáles son los más comunes a continuación.
No funciona el agua caliente
Este es uno de los fallos más habituales: abres el grifo del agua caliente y, por mucho que esperes, continúa saliendo fría. Esto puede deberse a distintos factores, aunque lo más común es que se deba a la bomba de presión de la misma.
Si este es el caso, la solución es bastante sencilla, solo tienes que comprobar que la presión de tu caldera esté entre 1,5 y 2 bares. Si ves que está por debajo tendrás que meter agua a la caldera, mientras que si está por encima tendrás que sacársela purgando los radiadores.
No obstante, si ves que la presión está bien y el problema persiste, puede ser un fallo de la válvula de tres vías, que es aquella que da paso entre la calefacción y el agua caliente. Este error es más grave y va a conllevar la sustitución de la pieza.
La temperatura del agua cambia
Es decir, la temperatura pasa de frío a caliente y viceversa, otro problema bastante común en el uso de calderas. En este caso, puede deberse al deterioro de la sonda de temperatura o el intercambiador y suele producirse por el paso del tiempo junto con el uso.
Lo más sencillo en este sentido es remplazarlos por unos nuevos para conseguir que la caldera vuelva a funcionar perfectamente.
La calefacción no se enciende
Por supuesto, el problema también puede ser que nuestra calefacción no se encienda, en cuyo caso lo primero que tendremos que hacer será revisar el termostato para comprobar que tiene pilas y que está a la temperatura correcta.
Si todo está en su sitio, probablemente se deba a algún fallo dentro de las válvulas de la caldera.
La caldera hace algún tipo de ruido
Como bien sabrás, muchas calderas hacen algo de ruido, pero existen algunos que son especialmente inquietantes y pueden ser un buen indicador de una posible avería. De esta forma, si escuchas una vibración, puede deberse a que la carcasa de la misma está mal colocada o a que existen problemas con el extractor.
Mientras que si se trata de un silbido, probablemente el problema es que el intercambiador está sucio. Y si es una pequeña explosión, el error está en la cámara de combustión y deberás limpiarla a fondo.
El circuito o la caldera gotean
Finalmente, puede darse la posibilidad de que nuestra caldera comience a gotear, en cuyo caso tendremos que comprobar la presión del manómetro para ver si puede deberse a que no se encuentre en el rango adecuado.
Después tendremos que echar un ojo a la llave de llenado para comprobar que se encuentra en buen estado y no tenemos que sustituirla. En cualquier caso, si detectamos cualquier tipo de defecto, tendremos que contactar con un experto que nos ayude a cambiar esa pieza para que nuestra caldera vuelva a funcionar con normalidad.
Como puedes observar, estos problemas son bastante comunes y pueden poner en peligro el funcionamiento habitual de nuestra caldera, por eso es importante que nos adelantemos a ellos realizando revisiones anuales a la misma que nos permitan comprobar que todo funciona correctamente.