Las superestrellas mantienen una increíble capacidad para disfrutar de la máxima atención de los medios de comunicación, pero esta condición de famosos también les permite enormes ingresos económicos que a su vez pueden traducirse en gustos a los cuales la gran mayoría de los mortales no pueden acceder y uno de ellos lo representan sus increíbles propiedades inmobiliarias, tal es el caso de la famosa Gal Gadot una actriz y empresaria de origen israelí que ha visto catapultada su fama gracias a sus increíbles papeles dentro de la gran pantalla y que al igual que la también actriz y supermodelo Cindy Crawford mantiene mansiones increíbles dentro de los Estados Unidos y alrededor del mundo.
La actriz y reina de belleza ha logrado adquirir un lujoso piso dentro de los límites de la costa de Malibú en el estado de California, a la también galardonada con el título de Miss Universo en el año 1988 Bui Simom por una suma de dinero importante, la cual se una a otras propiedades que mantiene en su poder al lado de su pareja sentimental y esposo Yaron Varsano como por ejemplo la ubicada en Hollywood Hills o la que se encuentra en su país natal Israel. Pero veamos al detalle este hogar frente a la costa, con una vista maravillosa al océano y que se ha adueñado de los gustos de esta pareja de famosos, hasta ser catalogada como una de sus casas preferidas por la misma Gal Gadot.
La mansión de Gal Gadot frente al mar de Malibú
La ubicación de este condominio es sin dudas exclusiva y su construcción data de 1984, está perfectamente enclavado dentro de los límites entre uno de los muelles de Malibú y el famoso restaurante Nobu, lo que sin dudas agrega cierto valor adicional a esta propiedad. Además de que la actriz podrá disfrutar en todo su esplendor el tragaluz de la edificación debido a que el piso se encuentra en la última planta de la construcción; una belleza arquitectónica de mucha espectacularidad con un muro de cristal que abre hacia un gran balcón y que plenamente justifican el costo final de 5 millones de dólares.
La edificación cuenta con un par de dormitorios y tres baños, donde destaca el espacio para el comedor que se encuentra junto a la cocina y que aunque de dimensiones que no revisten ser escandalosas permite muchísima eficiencia; asimismo está dotado de electrodomésticos de gama alta y de encimeras elaboradas en indestructible granito, con una totalidad de 186 metros cuadrados habitables, los cuales alcanzan para una gran sala familiar que está decorada con alfombras de lujo y la incorporación de una bañera y de un bidé para el dormitorio principal.
Un piso que está en plena conexión con el mar
La decoración de este hogar evidentemente se encuentra influenciada por las increíbles vistas que ofrece sobre toda la costa de Malibú y es que se ha decidido el empleo de colores claros con la plena finalidad de aprovechar de un modo eficiente toda la luz natural que golpea a esta casa y que gracias a sus amplios ventanales y al uso de mucho cristal pueden perfectamente bañar todo el interior, sin contar con el ya nombrado tragaluz en su techo.
La estructura interna de la mansión ha sido construida para que las estancias puedan permanecer abiertas entre sí, es decir: comedor, salón y cocina se encuentran en una conexión de máxima plenitud y por consiguiente alcanzando amplitud en su máxima expresión, lo que genera que esta pareja de famosos propietarios pueda disponer de conseguir el máximo provecho de cada metro cuadrado disponible. La decoración con una formalidad de gran sencillez permite que el salón principal mantenga parquet en su piso con una tonalidad igualmente clara y muros pintados de blanco.
La chimenea y la gran variedad de plantas ornamentales dan un toque de distinción pero de mucha naturalidad a este espacio, además es imposible que el toque oriental pase desapercibido y por supuesto va de maravillas con el minimalismo que domina la decoración interior de toda la estructura de la casa.
Una casa genial donde reina la sencillez y las plantas
Como ya se explicó anteriormente los espacios tratan de mantenerse conectados, logrando una espectacular sensación de holgura de la vivienda y que aumenta la sensación de los espacios disponibles, además de emplear mobiliario de madera que combina de forma genial con los hermosos pisos claros de parquet.
Si bien es indiscutible que la conexión de esta mansión con la naturaleza está dominada por el simple hecho de mantener frente a ella a la amplia costa de Malibú y donde el indomable mar y la naturaleza que se respira es la del aire libre, por lo que para el interior se ha dispuesto de una decoración que incorpora plantas que son ideales para amenizar, dar color y textura y que sin dudas son de un gran valor ornamental.
La zona de la terraza representa una de las más atractivas de esta casa y es que la impresionante vista hacia el cielo azul y hacia las cristalinas y bravas aguas que conforman el mar de Malibú son verdaderamente paradisiacas, esta terraza marca un estilo desenfadado con una simple mesa de forma alargada y algunos bancos de madera, siempre con la intención de respetar y de no interferir con las vistas hacia el océano y hacia una inmensidad de arena que te invita a lanzarte hacia ella.