La maternidad es un proyecto desafiante, un recorrido repleto de altibajos demasiado idealizado y con un exceso de expectativas sociales que a menudo hacen sentir un tanto de decepción y mucho, pero mucho cansancio, en especial cuando no se cuenta con un apoyo en casa y las labores domésticas de limpieza y mantenimiento recaen en su totalidad sobre los hombros de la madre.
Ahora bien, no es un camino de rosas, pero es hermoso, y eso nadie puede negarlo, sobre todo cuando conviven los peques y con un perro o gato y el amor desborda el hogar. Si estás aquí buscando consejos realistas para mantener la casa limpia y ordenada con niños y mascotas el máximo tiempo posible ¡Sigue leyendo! Te revelo algunos trucos prácticos que vale la pena poner en práctica para no caer en la desesperación.
Consejos para mantener el orden y la limpieza en casa con niños y mascotas
Ser mamá y tener mascotas al mismo tiempo es una gran responsabilidad, una experiencia incomparable y un sinfín de momentos y sentimientos que no se compran con nada. Sin embargo, ante todo somos seres humanos, y todo este romanticismo se esfuma con el estrés constante de ver caos y suciedad por doquier. Sigue estas recomendaciones y mantén la casa en orden sin frustrarte en el proceso:
Actúa rápido
Dejar para después es una de las prácticas más contraproducentes, por eso, si algo se cae, se derrama, si notas sucio, desorden o algo fuera de su sitio y tienes la posibilidad de enmendarlo, hazlo de inmediato. ¡Evitarás muchos arrepentimientos futuros!
Calzado y mascotas sucias fuera
Una de las prácticas más inteligentes de los países asiáticos es dejar los zapatos en la entrada o incluso fuera, y aunque por lo general no hacen por norma cultural, es ideal para prevenir mugre excesiva en el suelo de casa. En el caso de las mascotas, si han estado jugando en el parque, limpia siempre sus patitas antes de entrar.
Nota: Coloca una alfombra en la entrada para que atrape suciedad del exterior.
Dedica 20 minutos al inicio y al final del día
No es necesario dedicar varias horas al trabajo doméstico, en realidad basta con 20 minutos al inicio del día para ordenar las camas, arreglar los cojines de sillones y el sofá, lavar el inodoro y pasar la aspiradora. Lo mismo aplica al final del día para sacar la basura, fregar los platos sucios y limpiar la encimera. ¡La clave son los pequeños hábitos diarios!
Ayúdate con buenos productos de limpieza
Si bien es vital que sean seguros para niños y mascotas, también es primordial que sean lo suficientemente potentes para combatir la suciedad en menos tiempo y sin tanto esfuerzo. Hazte con una aspiradora de calidad, paños y mopas de microfibra y sustancias limpiadoras eficaces para tu tipo de suelo.
La rutina es amiga, no enemiga
La previa planificación y la división de las labores hogareñas entre los miembros del hogar es crucial para ganar la paz en la batalla campal contra la limpieza. Elabora un cuadro con los deberes de cada una de las personas que viven en casa, especifica que le corresponde a cada quien, y cuando debe hacerlo, así como también las tareas que se hacen a diario, por semana o cada mes. ¡Incluyendo cepillar al gato/perro habitualmente!
Busca ayuda
La carga de las tareas domésticas totales no tiene que llevarla únicamente la matriarca de la casa, de hecho, compartir el trabajo con otros miembros de la familia aptos ayudará a que sientas menos cansancio y que el orden se prolongue en el hogar. Y sí, los peques también pueden contribuir con labores adecuadas a su edad y capacidades, de esta forma ganarán responsabilidad y aprenderán a ser más organizados.
Deja al desorden ser
Cuanto antes aceptes que el caos es inevitable cuando hay niños en casa, más tranquilidad y paz mental tendrás. Por eso, habilita un espacio en casa donde pueda existir desorden y un tanto de suciedad, por ejemplo, un cuarto de juegos y el garaje para dejar los zapatos sucios, paraguas mojado y un mueble exclusivo para que las mascotas descansen.
Y, por último: ¡No te obsesiones! No siempre el desorden es un problema, al fin y al cabo, son niños y mascotas, y donde habiten habrá mugre y desorden, vamos, es la ley de la vida. No puedes tener todo bajo control, relájate y disfruta de lo verdaderamente importante: ¡Estás rodeada de amor!