Las casas prefabricadas están cambiando la percepción de los gustos de viviendas habitables en la sociedad actual debido a ciertas ventajas competitivas al momento de compararlas con los hogares de fabricación tradicional, donde obtienen claras ventajas relacionadas con el precio, la personalización, la facilidad de construcción, el montaje y además de ser ecológicas, transportables y extremadamente rápidas para estar disponibles para ser habitadas. En esta oportunidad analizaremos un perfecto refugio en las montañas de Taiwán, de la mano de un arquitecto de origen español y que ha logrado lo imposible gracias a la versatilidad que ofrece la construcción de un piso prefabricado.
Con la plena intensión de construir una casa digna de su jubilación y capaz de mantener una magnífica armonía con los entornos naturales y manteniendo la máxima seguridad frente a los elementos externos; cualidades que solo la firma UZ Architecture se atrevió a desarrollar basándose en el estudio de un arquitecto español y plenamente basada en un presupuesto limitado para enclavar esta casa de montaña entre dos valles. Un verdadero desafío que permitió aumentar aún más el alcance de este tipo de construcciones y seguir creciendo como una de las alternativas de mayor flexibilidad para ser empleadas como las casas del futuro.
La casa prefabricada oculta en las montañas de Taiwán
Una excelente potenciación de las vistas que te ofrece esta casa prefabricada gracias a su destacada ubicación y una correcta integración de la construcción con el ambiente que la rodea, pero protegiéndola del intenso clima caluroso de la región. Un desafío que verdaderamente coloco de cabeza a las empresas constructoras debido a la complejidad del proceso y a lo difícil del acceso a la zona de la construcción.
La simplificación del proceso de construcción y de los requerimientos fue un factor determinante, debido a la imposibilidad de acceso al área de montaje de la vivienda, lo que sin lugar a dudas resulto en utilizar una estructura metálica como la opción de máxima relevancia y la más adecuada. El volumen de la casa es de 5 x 16 metros, logrando un par de plantas para un refugio genial en tamaño, forma y sostenibilidad. Partiendo de un estilo contemporáneo y sumamente abierto en su interior, mientras que las fachadas y las cubiertas están perfectamente protegidas por un sistema de recubrimiento metálico.
Una casa que desafía la orografía
La parcela donde se encuentra ubicada esta vivienda prefabricada se encuentra en lo más profundo de Taiwán, específicamente en lo alto de una montaña y entre dos valles, este terreno presenta una considerable inclinación “pendiente” lo que efectivamente garantiza unas vistas impresionantes hacia ambos valles, pero generando grandes retos relacionados con la parte técnica del proyecto en sí, destacando:
- La adaptación de la casa prefabricada a la complicada y difícil orografía de la zona.
- Conseguir la necesaria privacidad y orientación para contrarrestar de un modo eficiente el caluroso clima de este país asiático.
La orientación como centro neurálgico de este piso
La orientación se decidió (norte – sur) con la premisa de crear una zona de parking que a la vez funciona de terraza cubierta aprovechando la orografía propia del terreno, en la zona norte la casa ofrece increíbles vistas gracias a la incorporación de gigantes cristalerías, las cuales además de proteger del sol permiten una excelente tasa de privacidad para la habitación y el baño principal.
Con respecto al sur, la casa ofrece una vista hacia el segundo valle y donde se encuentran la mayor parte de las zonas públicas cercanas a la vivienda, se ha implementado el modelo de dos aguas sin canalón para lograr la máxima protección de la estructura frente a fuertes vientos “tifones”; un sistema que además de elevar el volumen interno del espacio aprovechable permite un aspecto visual y estructural de gran solidez.
Un hogar soñado hecho realidad “DH House”
El total de la superficie de construcción se acerca a los 100 metros cuadrados de terreno y está denominada “DH House” donde DH son las iniciales de “Casa de los Sueños” un término que el futuro propietario de la mansión utilizo para lograr describir este proyecto al arquitecto español, quien finalmente logro dar cumplimiento a esta casa prefabricada, superando inmensos obstáculos tanto de presupuesto como geográficos.
Tanto el material de la cubierta como el de la fachada se revisten con el mismo mecanismo de junta alzada metálica y en el interior de los aleros el acabado varía para ofrecer mayor protección mediante una chapa metálica de mayor rugosidad. Al estar ubicada casi en la cima de la montaña su creación se limitó con relación al diseño y construcción por culpa del difícil acceso de maquinaria y transporte a la zona, de allí que se necesitó optar por una solución prefabricada para simplemente ser montada en su lugar de reposo final.
La casa está diseñada para mantener grandes superficies de cristal, las cuales obviamente debieron mantenerse alejadas de los rayos del sol y además toda la casa se abrigó con un sistema de aislamiento de unos impresionantes 10 centímetros de grosor y que adicionalmente se trató con una capa reflectante de radiación solar elaborada en aluminio, una solución que UZ Architecture se obligó a implementar para contrarrestar el implacable calor de la zona, potenciado mediante las aperturas que permiten los ventanales de cristal para favorecer la ventilación.
Un presupuesto ajustado para una vivienda prefabricada
Uno de los retos más extremos significo el de mantener un presupuesto ajustadísimo y en muchos casos prohibitivo, por lo que la imaginación estuvo al top en la ingeniería y la planificación de todo el proyecto, la estructura se mantuvo lo más simple posible y donde se necesitó de hacer el máximo uso de la simetría para facilitar al máximo la construcción. El costo total alcanzó los 120 mil dólares, incluyendo todo el proyecto, pero con un resultado impresionante con estilos sencillos, contemporáneos, protagónicos y eficientes para lograr una genial e insuperable combinación con el paisaje que la rodea.