Para dormir bien es indispensable disponer de un dormitorio que ofrezca las necesarias características a través de las cuales conciliar un sueño plácido, tranquilo y reparador, y los colores son esenciales para Marie Kondo en su búsqueda de orden y decoración. Pero indudablemente también son un complemento decorativo capaz de entregar lo necesario para que el cerebro pueda recibir las señales de reacción a este estímulo visual y condicionar el descanso.
Los colores hablan al cerebro de un modo especial, influenciando el estado de ánimo e induciendo muchas emociones, además está científicamente demostrada su efectiva capacidad para afectar el ritmo cardiaco, la presión sanguínea y la frecuencia respiratoria. Por ello, la experta del orden Marie Kondo no ha dudado en hacer un uso racional de ellos y conseguir una invaluable ayuda en la conciliación de un sueño que sea reparador y una bella decoración para el dormitorio.
A dormir bien con la gestión del color de Marie Kondo
La psicología del color es estudiada para analizar de un modo preciso la respuesta de las personas a las diversas tonalidades que ofrecen los colores. Es decir, tratar de averiguar la correcta percepción de los colores y su influencia en las actividades cotidianas que se desarrollan día a día. De allí que sea posible que los colores de un modo directo puedan afectar e inducir una diversidad de decisiones, emociones y sentimientos.
Los colores fríos están compuestos por tonalidades serias que están asociadas con sensaciones de tranquilidad, sosiego y calma, además de asociarse con el profesionalismo, destacando los grises, los violetas, los azules, los negros y algunas tonalidades de marrones y verdes. En contraparte, los colores cálidos están relacionados con emociones de felicidad y alegría y aportan sensaciones de pasión, destacando el naranja, los rojos y los amarillos.
El descanso de Marie Kondo a través del color
Estudios confirman que las personas escogen las gamas cromáticas de la ropa de vestir en dependencia del estado de ánimo del momento, generando una conexión que puede aplicarse al hogar y a los dormitorios. Una situación que es importante analizar con cuidado, ya que estos colores se recambian en contadas ocasiones y no deben estar basados en los sentimientos de un determinado día.
Pero es posible al menos conseguir que los espacios sean unos perfectos transmisores de calma y tranquilidad al apostar por tonalidades que generen serenidad, y nada mejor que los colores suaves y neutros, quienes entregan una sensación inconsciente de relajación y bienestar. Lo que asegura que son mejores para dormir que los colores brillantes, los cuales tienen un efecto contrario y llaman a la energización del ambiente y del cuerpo.
Analizando los colores para decidir
Marie Kondo hace un correcto análisis de cada uno de los más importantes colores como un paso esencial para decidir cuál utilizar, ya sea de un modo solitario o perfectamente acompañado de otras tonalidades. Siempre en la búsqueda de un mejor descanso y una excelente recuperación de las energías perdidas tras cada día de responsabilidades sociales, domésticas y laborales.
El impoluto blanco
El perfecto símbolo de la paz y de la serenidad, un color casi que insuperable para pintar los dormitorios y que al estar ligado a la limpieza y a la pulcritud permite una promoción de la serenidad. Condicionantes que lo catapultan a ser el color ideal para conciliar un sueño reparador, recalcando que el blanco es el color más claro del espectro cromático, pero con variaciones como marfil, ostra, tiza o perla.
La neutralidad del beige
Una insuperable tonalidad neutra y clara convierten al beige en una de las opciones de mayor gusto y proyección para pintar las paredes del dormitorio, simplemente porque está catalogado como una de las formas cálidas del blanco. Este color irradia serenidad y es apropiado para las habitaciones de niños y de adultos, así como un color perfecto para que el mobiliario llamativo sea uno de sus complementos favoritos.
La serenidad del azul
Ofrece una sensación de calma al ser un color relacionado con el mar y con el cielo, promueve la seguridad y la plena concentración, lo que permite por extensión aumentar la productividad ante cualquier actividad. Marie Kondo es una fiel defensora del azul por ser un color que promueve la eliminación del miedo y la conciliación de un sueño nocturno de calidad, al reducir la frecuencia cardiaca y la presión sanguínea.
Evocando lo natural con el verde
Simboliza de un modo especial todo lo que es natural, evocando jardines y árboles, resulta una tonalidad de alto placer y un perfecto colaborador en la obtención del relax y de un efecto calmante que dirige a las personas hacia un estado profundo de sueño y descanso. Está asociado con la calma y la tranquilidad y es perfecto para ser combinado con las tonalidades del blanco.