La madera es un material muy empleado tanto en la fabricación de suelos como de muebles, principalmente debido a su estética. Sin embargo, un punto negativo de la madera es que es algo frágil y puede perder el aspecto que tanto te cautivó cuando la compraste para tu hogar con el paso del tiempo.
Existen múltiples soluciones para ponerle remedio a este problema, pero la que más te recomendamos es barnizar tus muebles de madera. Esta técnica tan útil no solo te sirve para conservar muebles antiguos y darles una segunda oportunidad, sino también para proteger el medio ambiente y ahorrar dinero. ¡Descubre cómo hacerlo bien a continuación!
Cómo barnizar muebles de madera
Pintar la madera con barniz hace que el mueble en cuestión consiga una nueva imagen o apariencia, más actual y elegante. Por lo tanto, este método es altamente recomendable para diferentes tipos de madera. Estos son los pasos que debes seguir para hacerlo de la mejor manera posible:
Quita el acabado antiguo de la madera
En el caso de que tu mueble de madera haya sido pintado o barnizado con anterioridad, tendrás que decaparlo antes usando una pistola de calor, un quitapintura… o cualquier herramienta o producto que te sirva para ello.
Retirar los restos de pintura y laca anteriores es fundamental si quieres que el resultado final de la restauración de tu mueble de madera sea perfecto. Simplemente asegúrate de que la superficie queda lisa.
Lija el mueble
Si has comprado un mueble nuevo realizado en madera en crudo, es muy importante que lo lijes bien. Estas piezas de mobiliario suelen tener acabados refinados, pero a veces son ásperos al tacto y tienen alguna astilla levantada.
Como te hemos explicado en el anterior paso, la madera debe estar lo más lisa posible, y esto también se consigue usando una lija. Utilízala con suavidad y siempre siguiendo la veta o los dibujos de la madera. Para las superficies más grandes y lisas, es mejor optar por una lijadora eléctrica.
Elige el barniz que vas a aplicar en tu mueble de madera
Si tu mueble se encuentra en el interior de tu hogar, lo más sencillo es aplicar el barniz al agua, un producto muy sencillo de utilizar y que garantiza unos resultados de diez. Además, es muy fácil de encontrar en las tiendas.
Si, por el contrario, quieres barnizar un mueble de exterior, es mejor utilizar un barniz sintético para este tipo de madera. Se trata de un producto especial que protegerá al material de los rayos del sol y de las condiciones climatológicas adversas. También debes asegurarte de que tenga filtro UV, ya que asegura una mejor protección.
Aplica el barniz a la madera
Para que el producto pueda impregnarse bien en el mueble, has de pasar una primera capa sobre él. Te recomendamos seguir los consejos del fabricante a la hora de diluir el producto y de aplicarlo.
Utiliza una brocha para aplicar el barniz, siempre en la dirección que marcan las vetas de la madera. Para las esquinas más difíciles de alcanzar, lo mejor es usar un pincel con la punta redondeada. Después de su aplicación, deja que se seque durante las horas que recomiende el fabricante, aunque lo más recomendable es dejarlo un día entero.
Últimos pasos para barnizar el mueble
Una vez se haya secado el barniz, lija la madera de nuevo, pero esta vez de una manera menos intensa. Pasa la lija o la lijadora suavemente para quitar las asperezas que hayan podido quedar. Cuando hayas acabado esto, aplica una segunda capa de barniz.
Si tu intención es cambiar el color de tu mueble de madera, deberás elegir un tipo de barniz satinado del color que más te guste. Si simplemente quieres reforzar la protección del mueble, puedes utilizar el mismo que has usado antes. ¡Ya lo tienes! Esperamos que nuestros consejos te hayan servido de ayuda.