Si las picaduras de los mosquitos en tu hogar te desesperan, algo que pasa normalmente en verano, debes saber que puedes acabar con el problema con un antimosquitos. Puedes o bien comprarlo en una tienda o bien hacerlo tú mismo.
Nosotros te recomendamos más la segunda opción, pues el artificial puede contener elementos químicos que pueden ser perjudiciales para tu salud si estás expuesto a ellos durante mucho tiempo. ¡Aprende a preparar un antimosquitos natural por ti misma o por ti mismo!
Cómo hacer un antimosquitos natural
Lo bueno es que tienes varias opciones para crear tu propio antimosquitos y, sobre todo, lo mejor es que sus ingredientes son 100% naturales y fáciles de encontrar en las tiendas y supermercados. Estos son los más efectivos:
Antimosquitos de limón y clavo
Su modo de preparación es extremadamente simple: solo tienes que cortar un limón e introducir varios clavos de olor en la mitad de los pedazos o mitades. Después, coloca el pedazo de este cítrico en una de las habitaciones que más frecuenten.
El olor que desprende la mezcla de limón y clavo resulta insoportable para los mosquitos, y lo pueden detectar a una larga distancia. Por lo tanto, ten por seguro que si colocas este antimosquitos en tu cuarto, estos insectos no te molestarán más.
Un vaso de vinagre y agua como antimosquitos
Rellena un cuarto de vaso con vinagre de vino blanco y los otros tres cuartos con agua. Así de simple. Después, coloca esta mezcla cerca de las ventanas o de las puertas por donde estos molestos insectos puedan pasar y el olor les espantará.
El vinagre nos puede servir para muchas cosas, y no solo para cocinar. Para muestra un botón, este potente antimosquitos 100% natural que te servirá para combatir a estos insectos cuando llegue el calor.
Tu propio spray antimosquitos natural
Para elaborar este spray, necesitas: 100 mililitros de agua, una cucharada de albahaca seca, 25 gotas de aceite esencial de citronela, 10 gotas de aceite esencial de lavanda, 10 de aceite esencial de geranio, cinco de aceite esencial de árbol del té y, por último, cinco de cualquier conservante.
Pon un cazo con agua al fuego hasta que empiece a hervir. Después, apártalo y agrega la albahaca seca, como si fueras a hacerte una infusión. Cuela la preparación y echa al agua de albahaca todos los demás ingredientes. Mételo en un bote con spray y… ¡ya tienes tu propio repelente para mosquitos!
El papel de los mosquitos
Algunas especies de estos insectos pueden propagar virus, como el del Nilo, el dengue, el Zika e incluso parásitos como la malaria. No hay muchos tipos de mosquitos que transmitan microbios, pero aún así pueden ser peligrosos para ciertas personas, como los alérgicos. Sin embargo, no hay que olvidar que son excelentes polinizadores y esenciales para el mantenimiento del ecosistema. Por lo tanto, te recomendamos acabar solo con los mosquitos que te estén molestando, y no que vayas a buscarlos expresamente para matarlos.