Si quieres renovar el aspecto de tu cama, una buena forma es pintar el cabecero de la cama de tu hogar si es de madera. Se trata de un material muy fácil de pintar y decorar, por lo que no cuesta nada esta técnica decorativa.
No hace falta que seas un artista ni un pintor profesional: simplemente aplicando un método sencillo te bastará. Si quieres saber cómo pintar el cabecero de tu cama, te lo contamos a continuación.
Cómo pintar el cabecero de tu cama
Esta labor de bricolaje es una de las más sencillas que puedes hacer, por lo que no necesitarás completar muchos pasos para realizarla. El cabecero de madera de una cama se pinta de esta manera:
Saca el cabecero de la cama
Para trabajar más cómodamente, saca el cabecero y colócalo encima de una mesa. También debes tener en cuenta la postura del cuerpo a la hora de trabajar, para evitar que te lesiones la espalda.
Si tu cabecero está hecho de tela, lo primero que tienes que hacer es retirar esta capa quitando las grapas. Cuando tengas la tabla sacada, líjala bien por todos sus costados. Sin embargo, si la tabla estaba pintada, líjala muy bien para eliminar esa capa. Es necesario para añadir una nueva. Una vez termines de lijarla, quita el polvo que haya quedado. La superficie tiene que quedar lisa y limpia.
Aplica el tinte al cabecero
Si quieres aplicar más de una capa de tinte, recuerda que debes lijar la tabla por cada capa. La última mano que apliques también debes lijarla y posteriormente aplicar cera incolora para muebles y dejar que actúe durante media hora. Esta cera sirve para que el tinte quede bien y evitar que se deteriore.
Deja que la cera actúe durante media hora mientras se seque. Por último, saca brillo al cabecero frotando con un paño con rapidez y fruición para dejar su aspecto lo más pulido posible. ¡Ya lo tienes! ¡Un flamante y renovado cabecero de madera para decorar tu cama!
Medidas ideales para un cabecero de cama
Lo ideal es que el cabecero cuente con 4 o 6 centímetros más de anchura por cada lado que la medida de la cama. En una cama de 90, lo ideal sería un cabecero de unos 98 o 102 centímetros para compensar. Si tienes una cama de matrimonio, que es la más grande que puedes tener, su anchura debe ser de entre 143 y 147 centímetros. Si no tienes un cabecero de madera en tu cama y estás pensando en adquirir uno, apunta bien estas medidas para que encajen con tu cama.