Si no quieres gastar mucho dinero en la decoración de tu hogar, puedes recurrir a métodos más asequibles que le darán otro aire a tu casa. Uno de ellos es pintar las persianas. Si te cansas de su color y quieres variar un poco, es una buena solución, y sobre todo barato.
Hoy te enseñaremos a pintarlas, siempre y cuando estén fabricadas en plástico o en PVC, dos materiales muy comunes. Verás que no es tan complicado personalizar tu vivienda con pequeños cambios estéticos que la embellecerán.
Cómo pintar este tipo de persianas
Cualquiera puede hacerlo, pues el proceso no es en absoluto complicado. Puede resultar algo laborioso para algunas personas, pero créenos cuando te decimos que no te llevará tanto tiempo. En cualquier caso, para ello necesitas los siguientes materiales:
- Una pintura en spray especialmente diseñada para decorar superficies de plástico o de PVC: consulta con el encargado de la tienda donde la compres o con un experto en la materia si en verdad es una pintura especializada.
- Artículos de limpieza: los básicos (jabón, agua y trapos) para aclarar después.
Una vez tengas todos los materiales a tu disposición, toca meternos en faena. Sigue todos estos pasos y conseguirás un magnífico resultado. Si eres rápido y eficiente, podrás acabar el trabajo incluso en menos de media hora. ¡Apunta bien!
Protege el área de trabajo
Esto es fundamental. La pintura en spray es muy cómoda de aplicar, pero también es una de las que más ensucian. Por lo tanto, te recomendamos proteger la zona en la que vayas a trabajar utilizando, por ejemplo, cinta de carrocero, papel de periódico o revistas que ya te hayas leído y no te importe conservar en buen estado.
Limpia las persianas
En las persianas se suele acumular mucha suciedad. Por ello, después de cubrir bien todo lo de alrededor para que no se manche cuando apliquemos la pintura, debes utilizar el material de limpieza para darles una buena pasada.
Tienes que eliminar hasta el último resto. De lo contrario, el resultado final podría empeorar considerablemente. Nos interesa que la superficie esté completamente lisa e impoluta para poder pintar mejor.
¡A pintar!
Te aconsejamos inmovilizar las persianas fijándolas a la mesa de trabajo con un artículo de bricolaje, como un caballete, para que no se muevan mientras pintas. De este modo, la tarea te resultará mucho más cómoda y práctica.
Antes de utilizar la pintura, revisa las recomendaciones indicadas en el envase. Lo más común, sin embargo, es que tengas que pulverizar la pintura empezando por los lados de la persiana lenta y firmemente, de manera que ésta se distribuya bien por toda su superficie. Siempre realiza movimientos hacia atrás y hacia delante, avanzando de un lado a otro. Una vez hayas terminado, deja que se seque y… ¡Voilà! ¡Una flamante y colorida nueva persiana!
Como has podido ver, decorar tu persiana de plástico o PVC con tu color favorito no es para nada costoso. Cualquier persona con voluntad lo puede hacer en una tarde tranquilamente. ¡Esperamos que te hayan servido nuestros consejos!
