El precio de la luz ha subido en España más de un 60% durante el último año, lo que supone una subida de casi el doble con respecto a los otros países que se encuentran ubicados en Europa. Esto ha afectado tanto a los consumidores particulares, que no saben cómo van a poder pagar su factura de luz y calefacción este año, como a las empresas que han visto incrementados notablemente sus costes.
Por eso, el Gobierno ha decidido que ha llegado el momento de empezar a incorporar medidas que nos permiten obtener un mayor ahorro energético y algunas de ellas afectan directamente a las empresas. Si quieres saber cuáles son las recomendaciones lanzadas por la entidad para que las compañías consigan reducir el importe de su factura, continúa leyendo.
Consejos para ahorrar en la factura de la luz de una empresa
Los consumidores están pasando por un momento sumamente complicado debido a la Guerra de Ucrania, la cual está afectando de manera considerable al precio de todos los combustibles, pero no son los únicos que se encuentran con el agua al cuello, las empresas también lo están.
Esto ha llevado al Gobierno a animar a todos los ciudadanos a que pongan en práctica una serie de medidas efectivas para reducir su factura de la luz y así contribuir al ahorro energético. Pautas que tendrán que tomarse durante los próximos 3 meses para así cumplir con el plan que ha presentado España a la Unión Europea.
Pero, ¿en qué consisten estas medidas? A continuación te hablamos de las distintas recomendaciones.
Controlar los termostatos de las instalaciones
En primer lugar, el Gobierno ha lanzado una recomendación en los edificios de uso público para que haya un mayor control del termostato en las mismas, no obstante, siempre y cuando esto no incumpla ninguna de las normativas de prevención de riesgos laborales del mismo.
De esta manera, siguen vigentes las medidas del Real Decreto-ley 14/2022, de 1 de agosto, que establecen una limitación en refrigeración (27 grados). Con respecto a la calefacción tendrá que estar a un máximo de 19 grados, algo que puede contribuir al ahorro energético de manera considerable si todas las empresas se suman a la medida de utilizar una temperatura estable para sus instalaciones.
Incorporar el teletrabajo en mayor medida
Desde el surgimiento de la COVID, muchas han sido las empresas que han incorporado el teletrabajo dentro de una de sus modalidades de empleo, algo que ha conllevado la aparición de menos contagios y también un importante ahorro económico para las mismas.
De hecho, según Global Workplace Analytics, las empresas pueden ahorrar alrededor de 10.000 euros por cada trabajador si consiguen implementar la forma de que cada uno realice al menos el 50% de la jornada laboral desde su vivienda. Una pauta que ya se ha incorporado en la Administración General del Estado, donde ya se puede teletrabajar hasta 3 días por semana.
Cambiar las bombillas habituales por LED
El cambio de las bombillas normales por luces LED es otra de las cuestiones que marca el Gobierno para conseguir un mayor ahorro en la factura de la luz de una empresa, y es que pueden suponer un importante recorte en el gasto energético, el cual llega a ser de hasta un 60%.
Además, este tipo de dispositivos funcionan con 10% menos de potencia que las bombillas habituales y tienen, a su vez, un 10% más de efectividad. Por eso se han convertido en la clave del ahorro tanto en empresas como en viviendas particulares.
Incorporar sensores de luz
Los sensores de luz y de movimiento son aquellos que nos permiten hacer uso de la luz solamente en aquellos momentos en los cuales sea necesario y muchas viviendas ya los han incorporado en sus zonas comunes.
No obstante, este es un trabajo que aún está pendiente en muchas empresas y que puede suponer un ahorro que va desde el 2 hasta el 45%.
Programar el sistema de luz de la empresa
Además, si queremos ir más allá, también se puede buscar la manera de programar la actividad de iluminación de una oficina mediante un sistema de control centralizado o BSM.
Este tipo de herramientas inteligentes nos ayudan a optimizar la iluminación de un espacio en función del número de personas que estén trabajando allí y los momentos en los cuales lo hagan para así conseguir el máximo ahorro posible.
Incorporar elementos arquitectónicos blancos o cristaleras
Finalmente, otra de las pautas recomendadas para las empresas es la de incorporar en sus instalaciones mamparas transparentes o cristaleras, además de pintas las paredes en un tono blanco o claro. De esta forma se gana gran amplitud en las mismas a la vez que se permite una mejor ventilación y la llegada de la luz natural.
Cuestiones que no solamente van a afectar a nuestra factura de la luz, sino que también pueden contribuir al estado anímico de los trabajadores.