La cocina es uno de los lugares de nuestra casa cuyo consumo energético es mayor debido, principalmente, a los electrodomésticos que hay en la misma y que son necesarios para nuestro día a día. Por eso debemos saber cómo sacarle el máximo partido y reducir el gasto de los mismos para así ahorrar más dinero.
En este sentido, el horno es uno de los electrodomésticos que se ubica en el top 3 de los que más gastan, sobre todo si no sabemos utilizarlo correctamente. Por eso hoy nos vamos a centrar en aquellas pautas que nos permiten usar nuestro horno de una forma más eficiente, continúa leyendo para descubrirlas.
5 consejos para reducir el consumo energético de tu horno
El consumo de energía de los electrodomésticos es un gasto totalmente necesario y, como tal, no podemos evitarlo. Pero lo que sí podemos hacer es buscar la manera de reducirlo en la medida de lo posible.
¿Cómo? Básicamente, aplicando ciertas pautas que nos permitan realizar un uso más consciente y adecuado de este dispositivo, las cuales te vamos a comentar con mayor detalle a continuación.
Utiliza el horno de forma eficiente
El empleo eficiente de los electrodomésticos es una de las claves para conseguir un mayor ahorro energético y, en el caso del horno, puedes mejorar la manera de usarlo de distintas formas. Te las explicamos en detalle:
- Cuidado a la hora de precalentar. Muchas veces tenemos la tendencia a precalentar el horno por periodos de tiempo excesivamente largos, lo que puede conllevar un mayor gasto de energía del debido. Para evitarlo, lo mejor es que sigas las instrucciones marcadas en la receta y te ajustes lo máximo posible a los tiempos marcados.
- Aprovecha el calor residual. Al igual que ocurre cuando cocinamos con una vitrocerámica, el hecho de apagar el horno no significa que este no siga cocinando durante un tiempo determinado. Esto es lo que se conoce como calor residual y podemos utilizarlo a nuestro favor para terminar de cocinar nuestras recetas sin necesidad de gastar energía de más.
- Cocina varios platos a la vez. Por último, a la hora de cocinar también puedes aprovechar para preparar distintas recetas al mismo tiempo. De esta forma tendrás tu menú listo de una manera más sencilla y, además, aprovecharás en mayor medida el gasto de energía.
Estas pautas de cocinado, que pueden parecer lógicas, muchas veces no se llevan a cabo, lo que provoca que el consumo energético de este aparato se incremente de forma exagerada, llegando a afectar de manera seria a nuestra factura de luz.
Elige recipientes adecuados para el horno
Muchas veces el problema está en que utilizamos dispositivos que no son adecuados para el horno y el tiempo de cocinado aumenta. Por eso, lo mejor es optar por recipientes metálicos o de algún material que retenga bien el calor. Además, también se pueden emplear tapas aptas para el horno, ya que de esta forma el calor se mantendrá mejor y el plato se cocinará mucho más rápido. Por lo que, no lo dudes y comienza a adquirir recipientes para horno que incorporen esas tapas o tengan un formato más cerrado.
Limpia tu horno de manera habitual
La limpieza de cualquier electrodoméstico de nuestra casa es básica si queremos que este gaste la mínima energía posible. Y es que, con el paso del tiempo, la suciedad tiende a acumularse en el mismo y provoca que tenga que hacer un mayor uso de los recursos para funcionar correctamente.
Pero el mantenimiento no debe limitarse solo a tener nuestro horno limpio, también debemos comprobar que todas las piezas encajan y funcionan correctamente. Por ejemplo, si la puerta no cierra bien, se pueden provocar fugas de calor que hagan que el horno necesite más tiempo para preparar un plato, por lo que es esencial controlar el sellado de la puerta.
Opta por dispositivos con alta eficiencia energética
Por último, también es importante tener en cuenta la eficiencia energética del aparato porque, aquellos que la tienen más alta, son los que menos consumen. Esto implica dejarse guiar por la etiqueta energética de los electrodomésticos a la hora de comprar uno y elegir aquellos que tengan una A++. Evidentemente, si no tienes que comprar un horno, va a ser complicado que este factor te afecte. Pero, en caso de tener que hacerlo, te recomendamos optar por algún dispositivo que te asegure que el consumo a largo plazo va a ser más bajo.
Considera utilizar otros electrodomésticos para cocinar
Como bien sabes, el horno no es el único dispositivo que puedes utilizar para cocinar, por lo que debes tener en cuenta el resto de alternativas a tu disposición. Por ejemplo, la freidora de aire puede ayudarte a preparar recetas similares y su consumo energético es más bajo.
Adapta cada una de tus recetas y ten en cuenta si puedes llevarlas a cabo con otro dispositivo que tenga un gasto de luz menor. Una forma muy sencilla de hacerlo es recurrir a Internet, poner el nombre de la receta que estás buscando y el aparato con el cual la quieres llevar a cabo, verás como te salen muchas opciones.
Como ves, las pautas que te mostramos hoy son sumamente sencillas, pero pueden ayudarte a sacar el máximo partido a tu horno sin necesidad de preocuparte por la factura de la luz. Así que no lo dudes más y comienza a aplicarlas desde hoy.