El método KonMari de Marie Kondo y la perfecta búsqueda de orden y limpieza han generado una hecatombe de seguidores a nivel mundial, con hogares que ahora lucen relucientes y con un aspecto mucho más cargado de minimalismo, lo que ha creado una idea visual de gran impacto y con un perfecto acercamiento hacia la sostenibilidad, pero una cosa es ordenar el hogar y otra muy diferente es organizar los espacios, una acción que cambiará tu vida.
Los vocablos organizar y ordenar pueden darte una equivocada imagen de igualdad que hace referencia a una casa ordenada y limpia evocando a Marie Kondo, con una cocina perfectamente impoluta y espacios relucientes de limpieza. Pero es posible ir más allá y lograr un pleno compromiso con solamente ser más organizados y alcanzar una sensación de bienestar en todos y cada uno de los aspectos de la vida, para arribar al autocuidado personal.
Marie Kondo y el autocuidado de la organización
La organización es una forma efectiva de poder sin explotar, por lo que es posible asegurar que el autocuidado parte o inicia en la organización. Tal es el valor de la organización que es importante visualizar un mundo caótico, desorganizado y estresante por el simple hecho de que estamos llevando una vida donde abunda la desorganización. Con plenos sentimientos de miedo, pánico, irritación y ansiedad, logrando afectar de modo directo el estado de ánimo personal y social.
Además de desperdiciar una gran cantidad de tiempo que las personas podrían utilizar para vivir a plenitud, disfrutando de las maravillosas cosas que el día a día tiene disponible para todos. Y esto se puede constatar cuando se pierden minutos valiosos en la búsqueda de las llaves de la oficina o en aquel recibo que no sabes dónde colocaste por culpa de una evidente falta de organización de los espacios y de la vida en general.
El método KonMari como principio de organización de vida
El cuidado de sí mismo es una reacción innata de todos los seres vivos para la correcta conservación de la vida y es allí donde debe estar presente la organización como un aspecto evolutivo de los seres humanos con la intención de ser exitosos y de preservar una mejor calidad de vida en general. La organización además ofrece rutinas diarias para ser más eficientes y para actuar ante cualquier hecho inesperado que se salga de la rutina acostumbrada.
Pero al ser una especie de energía, es importante mantenerla y alimentarla para recargarla, con un máximo de autocuidado que incluya descansos frecuentes para una eficiente recuperación mental y física de las extenuantes jornadas que generalmente la persona enfrenta en la sociedad actual. Un autocuidado que visto desde la perspectiva de la organización es un acto preventivo y al mismo tiempo proactivo, para vivir a plenitud.
Organización y orden: Mejor calidad de vida
Organizarse en lo personal, incluyendo el aspecto “hogar y laboral” es una forma perfecta de cuidarse y ganar en salud corporal y mental, porque vivir y laborar en espacios organizados y ordenados permite que el desarrollo se obtenga con la necesaria plenitud y con las correspondientes dosis de optimización de cada una de las labores realizadas a diario. Logrando la tan anhelada felicidad y el bienestar emocional y social que todos desean.
La organización del hogar también es capaz de crear las condiciones necesarias para ganar tiempo y vivir en un espacio que sea saludable, alegre y limpio. Lo que elevará la productividad y la felicidad y generará las necesarias energías positivas para crear un ciclo o círculo vicioso que simplemente empuje hacia una organización más eficaz, lo que sin dudas creará más beneficios y una perfecta retroalimentación al mejor estilo de la escritora japonesa Marie Kondo.