La búsqueda de fuentes energéticas nuevas ha sido una de las tendencias más claras del año 2022, con especial hincapié en las energías renovables. Aunque parece que va a ser algo que se mantenga también durante 2023.
En un contexto marcado por una crisis energética sin precedentes, encontrar nuevas alternativas que nos permitan cuidar el planeta es clave, y el hidrógeno verde parece ser una de las mejores. Si quieres saber más sobre él, continúa leyendo.
Hidrógeno verde, la energía que atrae todas las miradas
Entre todos los tipos de energía que se están investigando recientemente como fuentes alternativas de energía que utilizan métodos limpios, hay una que está destacando especialmente y es el hidrógeno verde.
Pero, ¿qué es y cómo funciona este sistema? El hidrógeno verde es una forma de hidrógeno que se produce a través de la electrolisis de agua, empleando energía eléctrica producida a partir de fuentes renovables como la solar o eólica.
Precisamente por ello, el hidrógeno verde es considerado una forma de almacenamiento de energía renovable. De hecho, a diferencia del hidrógeno tradicional, no emite ningún tipo de gas de efecto invernadero a la atmósfera.
Esta energía puede ser usada como combustible en motores de combustión interna o celdas de combustible, pero también en procesos industriales y de transporte. Siendo una de las alternativas más interesantes actualmente para contribuir a la descarbonización del planeta.
En qué nos beneficia utilizar el hidrógeno verde
Al igual que ocurre con otro tipo de energías renovables, el hidrógeno verde tiene algunas ventajas que debemos conocer. Te las explicamos:
- Es un combustible renovable y sostenible. El hidrógeno verde se produce a través de procesos limpios y sostenibles, utilizando energía eléctrica producida a partir de fuentes renovables como la solar o eólica.
- Contribuye a la descarbonización del planeta. Como hemos comentado más arriba, puede sustituir el combustible en motores de combustión interna o celdas de combustible, y no genera emisiones de CO2 durante su uso.
- Nos permite almacenar la energía. Puede ser almacenado y transportado fácilmente, lo que lo convierte en una forma eficiente de almacenar la energía producida por fuentes renovables, como la solar y eólica.
- Tiene diversos tipos de aplicaciones. Se puede emplear en una gran variedad de aplicaciones, como la generación de electricidad, el transporte, la industria y el calentamiento y enfriamiento de edificios.
- Contribuye a la seguridad energética. Al reducir la dependencia de combustibles fósiles importados, el hidrógeno verde puede contribuir a aumentar la seguridad energética de un país o región.
España, un país pionero en el uso del hidrógeno verde
A pesar de ser relativamente nuevo, el hidrógeno verde ha tenido una gran acogida en muchos países, pero especialmente en España.
De hecho, esta misma semana el consejo de ministros ha aprobado un real decreto con el que concede 74 millones de euros a cuatro proyectos de hidrógeno renovable, colocando a España como uno de los países que más ha crecido en el ámbito de energías renovables.
Y es que, durante los últimos meses, este país ha duplicado su número de instalaciones de placas solares y la creación de parques eólicos. Colocándose a la cabeza de muchas iniciativas de transición energética.
Ahora, gracias a estas ayudas, empresas como H2B2, Sener, Nordex e Iveco movilizarán un total de 245 millones de euros destinados al estudio del hidrógeno verde en proyectos que tendrán lugar en Asturias, Navarra, País Vasco, Sevilla, Valladolid, Madrid y Barcelona.
Como ves, el hidrógeno verde es la energía del futuro y por eso es importante que comencemos a conocerlo un poco mejor.