Una de las especies más usadas es el mundo de la cocina es el laurel. Esta hoja es popular por su aroma intenso, fresco y balsámico, que combina el dulzor con un mínimo toque de picante. Sin embargo, el ámbito culinario no es el único en dónde hace acto de presencia, en la limpieza y cuidado de casa también es un gran aliado.
Si bien este condimento en forma de hoja seca es protagonista en miles de recetas deliciosas, a su vez funciona para acabar con olores de molestos en espacios cerrados y a su vez para aportar un aroma mucho más agradable. En esta oportunidad, quiero revelarte cuál es la forma de usar hojas de laurel para eliminar malos olores en la nevera sin esfuerzo alguno. ¡Sorpréndete de su versatilidad tanto como yo!
Cómo eliminar el mal olor de la nevera usando hojas de laurel
Se trata de un sencillo, pero muy práctico truco que disipa tufos fácilmente en casi cualquier lugar, no solo la nevera, sino también en armarios, cajones de ropa y estancias olorosas (ideal si vives con alguien que fuma cigarrillos constantemente). Presta atención y sigue estos pasos para disipar el olor desagradable del frigorífico fácilmente con laurel.
- Vacía la nevera, saca todo lo que esté en su interior y poco a poco deshazte de los platos casi vacíos, alimentos dañados o caducados.
- Limpia con algún producto desinfectante todas las superficie. En este caso, si prefieres las alternativas ecológicas y caseras, puedes usar vinagre blanco, zumo de limón e incluso bicarbonato de sodio. No olvides también vaciar y lavar los cajones y los accesorios de las puertas.
- Una vez hecho lo anterior, llena un recipiente con agua tibia y sumerge varias hojas de laurel un par de minutos.
- Pasado este tiempo, coloca una o dos hojas humedecidas en cada estante y cajones de frutas y verduras.
¡Y listo! Al cabo de un par de horas, absorberán el tufo y se emanará el agradable aroma característico del laurel.
Nota: Ten en consideración que las hojas de laurel pueden usarse tanto frescas o secas, no obstante, si están secas, su aroma es aún más intenso.
Otro truco interesante para quitar mal olor del refrigerador es picar un limón a la mitad e incrustar algunos clavos aromáticos. Igualmente, puedes colocar una taza con bicarbonato al fondo o simplemente una miga de pan impregnada con vinagre. ¡Y despídete para siempre de la pestilencia en tu frigorífico!