He de confesarlo: ¡Soy amante de los refractarios de vidrio! No importa si son circulares, cuadrados o rectangulares, son mis predilectos a la hora de preparar mis recetas más deliciosas y servirlas directamente en el comedor, en especial cuando llegan visitas y quiero sorprender —de buena manera— a los comensales. Ahora bien, aunque son bastante resistentes al calor del horno o microondas y al frío del refrigerador, para nadie es un secreto que su limpieza es un tanto delicada, sobre todo cuando aparecen manchas oscuras por alimentos quemados.
Si has llegado a esta web en busca de datos útiles y métodos para limpiar refractarios de vidrio manchados y llenos de grasa fácilmente ¡Has dado en el blanco! Te contamos el hack más recomendado para deshacerte de la suciedad que no sale solo con detergente para platos y dejarlos como nuevos.
Cómo eliminar las manchas en refractarios de vidrio
Estos utensilios son muy útiles a la hora de cocinar, servir, guardar y conservar comidas ya preparadas. Son higiénicos, duraderos y resistentes, no obstante, al igual que los de plástico, si no se lavan correctamente y con productos adecuados, no están exentos a la mugre pegada y a la grasa difícil de salir. Sigue estos consejos y elimina las manchas en los refractarios de vidrio en minutos.
- Antes que nada, lávalos como de costumbre con jabón para lavavajillas y agua tibia. Ten presente que, aunque mucha gente piensa lo contrario, el vidrio refractario no soporta cambios bruscos de temperatura, por ejemplo, de muy caliente a muy frío.
- Hecho esto, haz una solución limpiadora con 3 cucharadas de vinagre, el zumo de un limón y media taza de bicarbonato de sodio.
- Esparce esta mezcla con ayuda de una esponja o cepillo pequeño donde notes restos de grasa y manchas oscuras de residuos quemados. Espera que actúe por un par de horas.
- Pasado este tiempo, notarás como la mezcla hecha para limpiar se torna oscura, es ahí cuando llega el momento clave para seguir frotando con fuerza con ayuda de una esponja áspera.
- Enjuaga con agua tibia varias veces y ve añadiendo agua caliente poco a poco para que termine de remover la suciedad que haya quedado.
Si notas que aún quedan manchas, repite este procedimiento, pero deja actuar el vinagre, limón y bicarbonato por el doble de tiempo. Recuerda que la eficacia de este truco casero va ligada a lo manchado que esté el refractario, así que nuestro principal consejo es que no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy; lava tus utensilios y recipientes inmediatamente después de comer y no esperes a que la grasa se adhiera de forma inminente.