Uno de los productos más populares en lo que respecta al contenido viral #cleantok en redes sociales es el vinagre blanco, una sustancia predilecta por los “gurús” de limpieza y mantenimiento del hogar que funciona como limpiador multiuso en una larga lista de superficies y materiales e incluso como desinfectante.
Su elevado contenido de ácido acético es capaz de ablandar la grasa para desprenderla fácilmente, remover la cal y abrillantar espejos, vidrios y todo tipo de cristales sin esfuerzo. Una excelente forma de sacarle provecho a este económico, pero eficiente líquido incoloro, es como limpiador de baño, especialmente el tanque del inodoro. ¡Sigue leyendo y entérate de qué va este truco!
Este es el motivo por el que deberías limpiar el tanque del inodoro con vinagre
El activo más poderoso del vinagre es su acidez, que no es tan agresiva como para maltratar tejidos ni superficies (a menos que sean de piedra natural como el mármol o granito) y es bastante fuerte, siendo capaz de eliminar manchas y suciedad rebelde, en especial si es causada por depósitos minerales. Sigue los siguientes pasos y mantén el tanque del inodoro en buen estado:
- El primer paso es cerrar la llave de paso para que el tanque no se llene de agua.
- Vacía el agua del tanque hasta que quede totalmente vacío, (este paso es indispensable).
- Hecho esto, empapa una esponja con abundante vinagre blanco y frota todo el interior, con más insistencia en las partes oxidadas o con más depósitos de cal.
- Deja que el ácido acético haga su función durante 15 a 20 minutos y luego restriega con un cepillo mojado con más vinagre las paredes y la base, y usa la esponja para los objetos más pequeños, como la cadena o el tubo de llenado ¡Y no te olvides de las esquinas!
- Como paso final, abre nuevamente la llave de paso de agua, llena el tanque del inodoro y tira de la cadena. ¡Y listo!
Plus: Puedes añadir un poco de jabón líquido y el zumo de 2 o 3 limones para intensificar la acidez y ayudar a que la mugre acumulada y el mogo pegado salga con más facilidad.
Con el clásico y común vinagre blanco que tienes en la cocina no solo puedes descomponer la suciedad alojada en el tanque del inodoro, sino también en la mampara, los azulejos, el lavabo e incluso el interior de la taza del WC. Adicional a eso, sus propiedades antomicrobianas limitan la reproducción de bacterias, una de ellas, la E. coli. ¡Sin duda es el aliado casero más económico y efectivo!