Acabas de lavar un lote de copas y vasos, pero por alguna razón todavía se ven empañados y con un residuo blanco en el fondo, sin duda necesitan otro proceso de limpieza que sea más profundo. Según expertos, la mugre persistente en las copas y vasos tiene alguno de estos orígenes: los minerales del agua dura están creando una acumulación tipo película sobre el cristal o tu lavavajillas grabó permanentemente el vidrio.
Si tu problema tiene su origen en el agua dura, necesitarás algunos elementos esenciales de limpieza. Pero, no te preocupes, son realmente fáciles de conseguir y económicos. Se trata del bicarbonato de sodio y el vinagre, el dueto imparable en la limpieza del hogar.
Método de limpieza con bicarbonato de sodio y vinagre para limpiar las copas de cristal
Para limpiar tus copas y vasos necesitarás vinagre blanco, bicarbonato de sodio y un trapo de microfibra. Además de los vasos, también puedes usar el siguiente método para limpiar jarrones empañados, elementos de las mesas de vidrio y ventanas que no se pueden remojar en un balde de vinagre. El proceso es muy sencillo, básicamente se trata de rociar un poco de vinagre directamente sobre la superficie de vidrio, dejarlo reposar de 5 a 15 minutos y limpiar el vinagre con un paño de microfibra húmedo y luego usa un paño seco para secar el vidrio.
Remoja los vasos o copas en vinagre blanco
Si el problema de limpieza de tus vasos es por los minerales del agua dura, todo lo que tienes que hacer es remojarlos durante cinco minutos en vinagre blanco. Como es ácido, disolverá los minerales. Para manchas muy gruesas, puedes calentar el vinagre antes de remojar.
Usa bicarbonato de sodio para manchas fuertes
Si las manchas rebeldes aún persisten luego del tratamiento con vinagre, frótalas suavemente con un poco de bicarbonato de sodio en la yema del dedo. Debes ser extra suave aquí, ya que el bicarbonato de sodio es ligeramente abrasivo y no debe rayar, pero agrega unas gotas de agua para hacer una pasta si te preocupa dañar el vidrio.
Enjuaga las copas y vasos
Luego enjuaga cada vaso individualmente a mano con agua tibia o fría y seca el vidrio con un paño de microfibra. Usa una toalla sin pelusa o un paño de microfibra antes de volver a beber de ellos. Es mejor hacer esto tan pronto como los enjuagues para que no se acumulen nuevas manchas de agua dura en el fondo mientras se secan al aire.
¿Cómo prevenir el daño permanente en el vidrio?
Si el proceso anterior no funciono, es probable que tu vidrio esté grabado, lo que, lamentablemente, significa que no mejorará. Esto sucede con algunos tipos de cristalería en el lavavajillas, es permanente y no se puede quitar. Para evitar esto, debes lavar a mano tus vasos más preciados. En algunas partes del país, el agua blanda o ablandada mecánicamente combinada con detergentes para lavavajillas y calor puede causar grabado, un cambio real en la estructura de ciertos tipos de vidrio. Ocurre tanto en cristal de plomo caro como en cristalería barata.
Si tienes agua ablandada, usa la menor cantidad de detergente necesaria para obtener una buena limpieza, no sobrecargues el lavavajillas para que el agua pueda correr libremente y retira los vasos inmediatamente después del ciclo de lavado para evitar el alto calor de secado, que puede acelerar el grabado. Sécalos a mano o simplemente manténgalos fuera del lavavajillas por completo y lávelos a mano.