El cuidado de nuestro hogar es algo que no debemos descuidar en ninguna temporada, así lo afirma la gurú japonesa del orden Marie Kondo: “La limpieza es el acto de enfrentarse a sí mismo”. No importa si el calor del invierno nos suplica salir a disfrutar o si el frío invernal nos obliga a mantenernos abrigados y cómodos. Aunque a muchos les parece algo tedioso, limpiar la casa tras cada cambio estación es primordial si quieres mantener paz, bienestar y un ambiente agradable en tus tiempos libres o mientras trabajas desde casa.
Es por ello que debes tener en cuenta que limpiar a fondo en primavera no es lo mismo que en invierno, ya que en ambos casos los cambios atmosféricos pueden afectar más unas zonas que otras. Por ejemplo, en invierno no se usa tanto la terraza como en verano ¿No lo crees? Si quieres saber más acerca de este tema y conocer cómo realizar una buena limpieza estacional, ¡sigue leyendo! Y aprende a mantener la casa impoluta durante los 365 días del año.
Como organizar la limpieza del hogar según cada estación
Cuando pasa cada estación, las circunstancias meteorológicas cambian, es decir, en un momento puede haber mucha humedad y al siguiente mes nos da alergia a causa de la inmensa cantidad de polvo y la sequedad del ambiente. Si podemos adaptar nuestra vestimenta al pasar de shorts y camiseras a chaquetas y guantes, fácilmente podremos adecuar el aseo particular de nuestra vivienda a los cambios estacionarios y a los factores que los caracterizan. Presta atención a lo siguiente:
Limpieza en primavera
Lo primero que viene a la mente cuando nos referimos a la limpieza de primavera es “renovación”, es por ello que se hace hincapié en ventilar y reducir la concentración de CO₂, regular la humedad y mitigar malos olores. Si tienes problemas de alergia, ventila solo a horas del mediodía para prevenir la elevada concentración de polen.
Otro hack en esta época es planificar el aseo profundo por estancias, habitaciones, un día y el resto de estancias (baño, cocina, jardín y terraza), otro. Enfócate en revisar todos los armarios, cajones y cestas de arriba hacia abajo, clasifica lo que ya no uses y tirarlo y dona lo que aún pueda servirle a otra persona.
Ataca el polvo acumulado en filtros de purificadores de aire, calefacción, humidificadores, en ventanas y rieles —el vinagre será un gran aliado— y en el suelo, eso sí, barriendo bien y separando mobiliario, sillones y camas de las paredes, pasando regularmente la aspiradora, sin olvidar también higienizar las alfombras y si es posible sacarlas al sol para que se desinfecten de manera natural.
Limpieza en verano
Ya sé, a pocos nos gusta pasar los cortísimos días de vacaciones llevando a cabo tareas domésticas, pero es el tiempo ideal para limpiar colchones, cambiar las sábanas, lavar las almohadas, aspirar alfombras, recoger telarañas en techos y paredes, limpiar lámparas, ventanas y persianas y prestar mucha atención al polvo, pues mientras más calor, más se incrementa.
En estos días llega la hora de limpiar el jardín, terraza y el garaje, también de lavar, doblar y almacenar la ropa de frío en zonas seguras para que no se estropeen, higienizar las mosquetas y alfombras, comprobar el estado de los desagües de baños y de la cocina, descongelar el refrigerador —el calor ayuda mucho con este proceso—.
Cuando toque guardar gruesos abrigos y jerséis, es vital lavarlos para no atraer polillas o insectos que arruinen la prenda. Lo mismo aplica para la ropa de cama, reemplaza mantas pesadas, nórdicos y edredones por mantas más ligeras y frías. Adicional a eso, si has instalado cortinas gruesas, cámbialas por unas más delgadas.
Limpieza de otoño
Con la llegada del otoño nos despedimos del calor, esto quiere decir que hay que lavar y guardar la ropa especial del verano —adiós, traje de baño— y desempolvar las prendas para el frío. Si tienes una chimenea en casa, es momento de limpiarla, hacerle mantenimiento y dejarla en su punto para que esté 100% operativa.
Limpia las ventanas y persianas, tanto por dentro como por fuera, ya que, durante el caluroso verano. Ten en consideración que estuvieron mucho más tiempo abiertas y esto trajo consigo un montón de polvo, suciedad e incluso insectos que cayeron en las rendijas.
No te olvides de los aires acondicionados que nos salvaron del calor intenso, lava las rendijas y los filtros, y si lo crees necesario, contacta a un profesional para un mantenimiento especial.
Limpieza de invierno
¡Jo, jo, jo! Llegamos al final del año, y sin duda alguna, la época más hermosa de todo el año. Nochebuena, Nochevieja y día de reyes, compartimos con seres amados y la alegría nos invade. Sin embargo, la misión principal es tener la casa impoluta, en especial el salón de visitas y el baño, pues es lo primero que se ve. La calefacción también es fundamental, revisa que funcione correctamente y hazle mantenimiento a las calderas y radiadores para no tener problemas en estos días de frío abrumador.
Si tenemos mascotas o niños pequeños, es importante higienizar las alfombras y sillones donde suelen estar, aspíralos como mínimo dos veces a la semana y asegúrate de que no haya pelos rondando por allí. Además, saca las alfombras peludas y calentitas que estuvieron guardadas, pero antes, sacude y aspira para eliminar el polvo o ácaros.
En esta época el exterior no es el sitio predilecto para sentarnos a ver videos de TikTok, mucho menos leer un libro, por lo que lo más recomendable es cubrir muebles y objetos del patio, terraza o jardín y protegerlos de las inclemencias de la lluvia, viento y la nieve.
Recuerda que el hogar es un refugio, te mantiene a salvo y deberías sentir paz en él. El orden y la limpieza te ayudarán a organizarte mejor tras cada estación y ayudarán a neutralizar las energías negativas cercanas a ti. ¡Mucha suerte!