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Una rutina de limpieza para sacarte una sonrisa: Tips de esta Marie Kondo española

El orden necesita de buen humor y de flexibilidad para ser conseguido exitosamente

La organización de las casas y espacios de trabajo es indispensable para que la vida sea más llevadera y así mismo generar un ambiente para que la salud, la productividad y las energías positivas se adueñen de cada instante y de cada rincón. Marie Kondo es categórica al aportar ideas y ayuda gracias a su método KonMari y ha logrado forjar embajadoras como Begoña Pérez, quien es una entusiasta en lograr el orden del hogar sin prescindir de una alta dosis de humor.

Limpieza y orden mediante una interacción de planificar, organizar, catalogar, purgar y limpiar, pero siempre involucrando a toda la familia y por supuesto incluyendo humor dentro de la fórmula. Una opción que definitivamente elevara las alternativas de éxito para que logres conseguir desde un armario ordenado perfectamente hasta la generación de felicidad y bienestar de un modo integral en todos tus espacios.

Marie Kondo y su consejo de ordenar con humor

El humor es una situación que debe mantener una sana presencia dentro de nosotros y sin dudas con una periodicidad diaria. Y es que esta condición permite increíbles mejoras en la capacidad de afrontar cualquier problemática desde un punto de vista muy enfocado y por ende lograr aumentar las posibilidades de alcanzar un éxito que sea satisfactorio en cuanto a calidad y rapidez. De allí que tanto la famosa Marie Kondo como sus embajadoras hayan establecido que el humor sea una condición imprescindible en cualquier iniciativa hacia el ordenamiento y la organización.

casa organizada ordenada

Todo proyecto donde se busque el fin supremo de ordenar debe estar precedido, visto y enfocado desde un punto de vista que utilice el humor y el buen estado de ánimo como un punto de partida. Y es que los estados mentales son de suma importancia para generar el clima propicio en el cual desarrollar las estrategias o la planificación para conseguir que el éxito se apodere de los resultados finales al momento de dedicarte a ordenar.

Conseguir espacios ordenados partiendo del buen humor

Alcanzar y disponer de una casa ordenada es el sueño de muchos y que evidentemente muchas veces es imposible de alcanzar, y una de las posibles causas de ello es que se aborda el problema de la limpieza y de la organización desde un punto de vista meramente científico y rígido. Apartando por completo los sentimientos y dejando fuera al sano humor. Por lo que es importante una efectiva mezcla de filosofía y métodos eficientes con su respectiva dosis de buen humor.

La obsesión forma parte del problema y es que muchas personas miran el orden desde un punto de vista que no es flexible y es allí donde en efecto se presenta el problema de una excesiva rigidez al momento de emprender cualquier planificación o de llevar a cabo las tareas de ordenamiento, clasificación, purga o verificación de felicidad que nos enseña Marie Kondo.

Y es que este humor no implica que debas apartar la seriedad, porque los espacios, sean del hogar o de trabajo, están perfectamente alineados con los pensamientos y por ende cualquier atisbo de desánimo repercutirá y se verá reflejado de un modo negativo en todo la estructura de la planificación para lograr ordenar los ambientes.

Eliminar el desastre de la casa sin molestarnos

Es perfectamente posible ordenar desde una mentalidad de desastre porque evidentemente se aprenderá en la medida en la que se practiquen las enseñanzas de Marie Kondo hasta lograr una especie de perfección o mejor dicho de saberes que se irán adquiriendo con la práctica. Pero todas estas tareas estarán influenciadas por factores externos a tener en plena consideración al momento de abordar una sesión de limpieza y ordenamiento de cualquier espacio.

Dentro de estas variables, el humor general de las personas será de gran influencia para determinar el rumbo de los resultados finales, por lo que en efecto es importante que siempre se mantenga un pensamiento flexible, dispuesto a adaptarse y mirando todo desde una perspectiva donde reine el humor y por extensión eliminar cualquier pensamiento o actitud de extrema seriedad o de rabia, que sin dudas entorpecerán de un modo directo cualquier esfuerzo o acción que busque que tus espacios puedan irradiar bienestar y felicidad mediante el orden.

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