Ordenar el hogar y cada uno de los espacios es una tarea buscada por muchos, pero el baño es un tema primordial y que merece mención aparte dada la dificultad que genera su limpieza y la correcta búsqueda del orden. Marie Kondo es plenamente consciente de ello y reconoce que optimizar el cuarto de baño es una tarea delicada, por lo que entrega un trío de geniales hábitos y un par de magistrales consejos para lograrlo sin problemas.
Todos buscan un método infalible que genere orden y limpieza y muchas veces este tipo de soluciones no son mágicas y, por lo tanto, requieren de la necesaria planificación y programación en dependencia del ambiente a ser ordenado. Cuando se trata del baño, Marie Kondo establece un plan donde se aborde por zonas y donde la premisa es mantener solo los objetos necesarios y la constancia en la limpieza y el ordenamiento de este lugar.
El orden definitivo de los baños según Marie Kondo
Marie Kondo afirma que el principal problema del orden de los baños está en la increíble y desmedida acumulación de artículos, siempre teniendo presente que los baños por regla general son ambientes limitados y donde el espacio total ha sido gestionado para ser reducido. En general, la mayor acumulación de productos tiene que ver con cosméticos, los cuales mantienen un uso esporádico, con promedios de solo un par de veces al año.
Además, para los artículos de uso habitual está el problema de que no tienen un lugar específico de almacenamiento, lo que genera desorden y pérdidas de tiempo, así como la posibilidad real de producir enfermedades por culpa de estar por allí descontroladamente esparciendo bacterias, humedad y otras cosas. Y finalmente la falta de espacio para llevar a cabo el necesario arreglo personal acostumbrado y que por ende se utilizan los espacios del baño.
Marie Kondo gestiona la organización del baño
Aunque son cosas y problemas perfectamente definidos y muy puntuales, es importante establecer que son ampliamente difíciles de abordar y de eliminar, ¿Por qué? Por la sencilla razón de que se han convertido en perfectos hábitos y por falta de un espacio realmente destinado a solucionar esta problemática (un vestidor, por ejemplo). Pero calma que Marie Kondo te regala sus tres ideas claras y precisas para que el orden del baño sea funcional.
Asignando el baño a un número finito de personas
Una cuestión catalogada de esencial y que no requiere de ningún esfuerzo especial, simplemente respeta el orden establecido para el cuarto de baño y mantén un uso personalizado, sin importar si son adultos o niños. Recuerda que los adultos necesitan de mayor espacio para sus artículos, por la sencilla razón de que generalmente no comparten sus artículos de higiene y cuidado personal, mientras que para los niños sucede todo lo contrario.
Asigna zonas por personas y dótalos de herramientas
Guardar las herramientas de cuidado personal individuales es de gran importancia para gestionar el espacio del baño y para mantener todo bajo control, además establece las herramientas comunes como por ejemplo el secador de pelo o la alfombra para la ducha. Los artículos personales pueden ir en cajones individuales y personalizados o en estanterías o en un cesto; el mercado está repleto de soluciones y de hermosas posibilidades para esta tarea.
Todos estos artículos de uso personal deben estar almacenados siguiendo un criterio de necesidad de uso, con la finalidad de no tener que desordenar todo el cajón o la estantería para conseguir un único producto. Si este artículo es de uso diario, debes colocarlo en la parte frontal para mantener el máximo acceso al producto deseado, sin olvidar que si el espacio es limitado debes optar por las opciones de formato pequeño de los productos.
Establece el orden y las normas de uso para el baño
Si algo facilita las normas de higiene en cualquier lugar y sobre todo en los baños es el orden, por ejemplo la inmediata limpieza del lavabo tras cada uso es primordial para evitar la acumulación de tareas pendientes y garantizar una actitud de limpieza en todo momento. Así mismo ocurre con la ventilación, el secado del piso, tirar de la cadena, ordenar la ropa sucia, bajar la tapa del inodoro y hasta la correcta eliminación de la basura del cesto del baño.