Los conceptos simples siempre han sido los preferidos de Marie Kondo cuando de orden, limpieza y organización se trata y en muchas oportunidades es mucho más fácil decirlo que llevarlo a la práctica. Por lo que la japonesa defiende que al momento de establecer la organización del hogar es de suma importancia adoptar como claves indispensable la clasificación de todos los objetos y su correcto almacenamiento.
Lo que dirige la atención directamente a la búsqueda de un hogar para cada cosa y mantener orden y organización dentro de los espacios del hogar, a lo Marie Kondo. Una tarea que puede parecer abrumadora, pero que no es imposible de lograr y que con la necesaria dosis de determinación, entusiasmo y paciencia se puedan alcanzar espacios que sean funcionales, ordenados y al mismo tiempo hermosos desde el punto de vista visual.
El poder organizacional de Marie Kondo para los hogares
Las palabras clasificar y contener son un par de las preferidas de Marie Kondo, permitiendo una óptima gestión de los objetos a través de categorías y a los que se les debe aplicar la frase “dividir y organizar”. Con ello es posible una certera ubicación de todos ellos al momento de necesitarlos, pero siempre manteniendo la constancia de que deben permanecer en sus sitios con la finalidad de ubicarlos y de eliminar la posibilidad de desorden.
La clasificación de los objetos es una de las técnicas preferidas de la japonesa Marie Kondo gracias a que es una de las más indicadas para potenciar la aparición del orden. Es posible clasificar por uso, por tipo o por ubicación, dependiendo de las posibilidades de cada casa en particular y de los espacios disponibles para el almacenamiento y por supuesto de la cantidad de objetos y cosas a ser ordenadas.
La clasificación como vía suprema al orden
Según Marie Kondo la clasificación por tipo es una de las mejores para dar comienzo a la gestión del orden de los hogares. Ya que permite la división de los objetos en categorías como por ejemplo artículos electrónicos, libros, ropa, calzados o documentos. Además de la clasificación por ubicación, la cual es ampliamente recomendada cuando se trata de objetos grandes que requieren de específicos espacios del hogar, como los muebles o los estantes.
Finalmente, está la clasificación por uso como otra de las formas de alta eficiencia a través de la cual lograr orden desde el propio comienzo, aquí es perfectamente posible dividir los objetos en categorías como por ejemplo los objetos de la sala de estar, de la cocina, del baño o del dormitorio. Funcionando a las mil maravillas con los objetos de tamaño reducido que no necesitan de un espacio específico para su almacenamiento.
Los contenedores como una opción de organización
Existen infinidad de maneras y variables válidas a través de las cuales utilizar los contenedores para gestionar el orden y mejorar la tasa de organización de un hogar. Por lo que en la lavandería irán de maravillas para almacenar todos los artículos de limpieza, almacenar la ropa sucia y trasladar la limpia hacia el tendedero y hacia la habitación y el armario una vez seca.
En la cocina es indispensable utilizar los botes herméticos para contener los alimentos y garantizar una larga vida útil, pero es posible ganar mucho espacio con soluciones que aprovechen la parte alta de la nevera o las esquinas de los muebles o los espacios de las paredes. Igualmente, es importante mantener organizados los artículos pequeños, para ello una cesta o una cajonera son indispensables para todos esos objetos que a diario se guardan en los bolsillos.
Para el cuarto de los niños y pequeños de la casa, una cesta de buen tamaño es perfecta para guardar los juguetes, útiles escolares y disfraces y todo aquello que pueda desordenar la habitación infantil. Para finalizar, una cajonera a modo de zapatera y un perchero para los abrigos o accesorios son ideas geniales que permiten que el orden se apodere del recibidor, así como una bandeja para las llaves de uso diario.