La conexión entre el cuerpo, la mente y los lugares o espacios es efectiva y está plenamente demostrada, una sensación que en muchos casos es complicada de traducir, pero que se convierte en una realidad palpable. Por lo que las condiciones de los espacios son responsables de incidir de forma directa en percibir sentimientos de comodidad o en su defecto de incomodidad, destacando que el orden de Marie Kondo es fundamental para los espacios del hogar o trabajo.
Son muchos los métodos existentes relacionados con la búsqueda del orden y uno de los destacados es el de la famosa arquitecta Mariel Murias, creadora del método MUMA. Un método que busca el propósito de recuperar e incorporar todos los sentidos a los espacios y permitir que los elementos de la naturaleza formen parte de un todo para vivir en armonía, es decir, un pensamiento muy cercano a la alegría buscada por el método de Marie Kondo.
Marie Kondo, los sentidos y el método MUMA
Involucrar a los sentidos para lograr espacios que sean emocionalmente perfectos es una técnica que resulta ganadora desde innumerables aspectos, y es que los sentidos son especialmente importantes para lograr una óptima sintonía entre el cuerpo y el hogar, entre la mente y los espacios. De allí que los aromas, las imágenes y las sensaciones táctiles son garantes de lograr convertir los espacios en sitios amables y cómodos para vivir.
La perfecta unión en el uso de todos los sentidos es una alternativa genial para desarrollar la mejor conexión entre las personas y los hogares. El KonMari de Marie Kondo por su tradición japonesa, permite la integración de los sentidos, de los aromas y de las vibraciones para crear ambientes limpios, ordenados y con una generosa carga de energías para lograr una interacción perfecta, al igual que el método MUMA.
Un método que integra los sentidos al estilo de Marie Kondo
“El olfato es la puerta física a un increíble universo emocional” reza la autora del método MUMA y arquitecta Mariel Murias, y es que los aromas son capaces de conducir al camino del encuentro de la memoria y perfectamente capaces de revivir incontables recuerdos. Estas imágenes mentales son desatadas por el simple aroma asociado a un recuerdo infantil y ofrecen un dinamismo que está cargado de sensibilidad y emotividad.
La estrategia es conseguir el aroma que dispare las emociones positivas y llevarlo a casa para que sea capaz de dejar huellas de un modo constante. ¿Cómo hacerlo? A través de plantas, velas aromáticas, esencias o flores. Logrando que estos elementos además aporten una altísima calidad visual y no olvidar que la cocina es un lugar perfecto para la creación de aromas que evoquen recuerdos como los guisos, los dulces o los horneados de la infancia.
La incorporación del sentido del tacto
Un sillón hermoso y cómodo es perfecto, pero que tal si le agregas una manta suave y almohadones más una taza de delicioso café, sin dudas una experiencia insuperable en calidad y en sensaciones que activan los sentidos, sobre todo el del tacto. Lo ideal es escoger las mejores opciones con respecto a los materiales, es importante que pueda existir o crear una conexión con la naturaleza y disfrutarla sin interrupciones.
Las texturas de los elementos naturales crean más allá de un efecto visual llamativo, la posibilidad de evocar sentimientos y recuerdos, lo que permite una extraordinaria conexión con los ambientes y los espacios, para desarrollar un perfecto gusto por permanecer en aquellos lugares donde sea posible conseguir estas precisas conexiones emocionales, logrando sumar el sentido del tacto a la esencia de habitabilidad.
El gusto y la vista aportan profundas sensaciones
El gusto va íntimamente ligado a la cocina y es un protagonista que es capaz de unir, transportar y alegrar la estadía, gracias a su plena capacidad para reconfortar. Los sabores han recobrado un especial protagonismo en la mente de las personas y nada mejor que una receta querida para transportar hacia un lugar en el que una taza de chocolate, un tazón de comida o un bowl de caramelos son los principales protagonistas.
La vista igualmente juega un papel prominente en la activación mental de los espacios y es determinante para inclinar la balanza hacia la decisión de si un lugar gusta o no. La primera información que el cerebro recibe generalmente es a través de este sentido y por ello hay que llevar a cabo un especial énfasis en destacar la decoración del hogar donde cortinas, muebles, espejos, iluminación y colores son responsables de dar un toque visual insuperable.
El infaltable oído
La música tiene el don de estimular cambios positivos en el estado de ánimo, de allí que sea perfecta para ser utilizada en aquellos momentos donde es necesaria una dosis de energía o simplemente para bajar un poco las revoluciones del ajetreado sistema actual en el que vivimos. Incorporar sonidos como el del agua o el viento, generan una óptima estimulación del cerebro, al igual que el canto de los pájaros o el de las hojas de los árboles.