El teletrabajo y la gran cantidad de opciones disponibles gracias a la tecnología han logrado que aumente el tiempo que las personas están en sus hogares y con ello es posible visualizar de un modo más certero la acumulación de suciedad y de desorden. Una situación que evidentemente se ha unido a la expansión de Marie Kondo y de su método de orden y limpieza llamado KonMari, y mediante el cual es posible lograrlo con una excelente tasa de éxito.
El método de la famosa Marie Kondo es perfecto y ha demostrado una amplia efectividad a través del tiempo para lograr resultados satisfactorios, se basa en el minimalismo y en la eficiente disminución de los objetos acumulado en el hogar. Pero ¿es posible mejorarlo?, la respuesta es sí, a través de una optimización de las rutinas que la escritora utiliza para ordenar, limpiar, organizar y planificar todo lo relativo a los espacios del hogar, trabajo o negocio.
Marie Kondo impulsa la ecología
El aspecto ecológico en el pensamiento de Marie Kondo siempre ha existido, pero podría mejorarse y esto afectará directamente tu salud, al disponer de mejores productos de limpieza. Lo ideal es considerar nuevas opciones y alternativas y deshacerse de la gran mayoría de productos tóxicos y dañinos tanto para el medio ambiente como las personas que los usan. Casi todos ellos liberan químicos y compuestos volátiles capaces de causas problemas médicos.
Reemplaza por opciones ecológicas los limpiadores con cloro para los inodoros y todos aquellos productos que incluyan en su composición hidróxido de sodio y amoniaco, porque realmente son causantes de daños a la salud. Lo ideal es emplear marcas reconocidas que ofrecen protección ambiental garantizada y en muchos casos utilizar solo agua, bicarbonato o vinagre y un paño de microfibra para limpiar las superficies y eliminar el polvo.
Utiliza las herramientas adecuadas como lo hace Marie Kondo
La tecnología muchas veces hace más daño que bien y las grandes industrias en su afán por aumentar sus ventas crean productos que evidentemente logran ganancias para ellas, pero no resultados para los clientes. De allí que sea primordial lograr escoger los electrodomésticos de limpieza con la mayor inclinación hacia los que ofrecen una mayor eficiencia. Es una cuestión de optimizar la escogencia en la compra de estos equipos y por supuesto ser más ecológicos.
Para los baños y las duchas existen excelentes opciones disponibles para llevar a cabo un buen trabajo de limpieza y desinfección, sin el uso de químicos peligrosos y ahorrando vital líquido tras cada operación de limpieza. Adicionalmente, puedes aumentar el uso de soluciones manuales, con estropajos ecológicos y mezclas de productos donde predominen los ingredientes naturales, con la finalidad de mejorar la salud y el ambiente.
Lavando la ropa con eficiencia
La ropa siempre ha sido un gran problema para lograr ser ordenada, clasificada y más aún cuando se requiere lavar, y esto se debe a su gran abundancia y a la efectiva conexión emocional que se crea entre las personas y sus prendas de vestir. Marie Kondo recomienda que si tienes el tiempo suficiente, lo mejor es llevar a cabo un lavado manual, con un remojo previo en agua caliente y utilizar productos naturales con resultados superiores a los de la lavadora automática.
Ordena antes de limpiar
Es literalmente imposible ordenar si existen objetos amontonados y aunque tengas las mejores intenciones de limpieza para tus espacios, la montaña de caos y de objetos hará que sea imposible hacerlo. Recuerda comenzar con algo pequeño y manejable como el armario o un escritorio e ir aumentando la dificultad y el tamaño de las áreas a limpiar y organizar. Para la cocina o la oficina es beneficioso utilizar recipientes para almacenar e incrementar las tasas de orden.
Es importante mantener suma atención sobre las superficies planas, estas son las principales enemigas del desorden ¿Por qué? Por la simple razón de que cualquiera puede colocar algo sobre ellas. Esta variable lleva a la correcta y necesaria designación de un lugar específico para cada objeto de la casa y con ello mantener la menor tasa posible de desorden dentro del hogar.
La rutina como causante del éxito
Está comprobado que la rutina es una de las principales promotoras del éxito ante cualquier actividad que quieras desarrollar, incluida por supuesto el orden y la limpieza de los espacios. Limpiar y ordenar de una misma manera crea el hábito para hacerlo con eficacia, de la manera correcta y con el menor riesgo de omisiones. Los expertos recomiendan comenzar por las áreas secas (sala, dormitorios) y luego atender las áreas húmedas (cocina y baños).