Estamos viviendo una época convulsa marcada por una subida de precios histórica, tanto en el ámbito de la alimentación como en lo referente a la energía, aspectos que han afectado directamente al bolsillo de los consumidores.
Esta situación apunta a que, durante los próximos meses, podríamos vivir una situación aún más compleja marcada por una crisis económica y por eso es necesario que nos preparemos para afrontarla. Por eso hoy te explicamos diversos métodos para ahorrar dinero y así prepararte para las vacas flacas.
La importancia de ahorrar dinero durante una crisis económica
Disponer de un colchón de dinero es algo esencial, ya que nos permite hacer frente a posibles imprevistos que nos surjan en nuestro día a día.
Pero ahorrar durante una crisis económica es aún más importante, puesto que puede ayudarte a mantener tu estabilidad financiera y protegerte contra los efectos adversos de la recesión como, por ejemplo, la pérdida de tu trabajo o una disminución de ingresos.
Por otro lado, debemos ser conscientes de que tener ciertos ahorros no solamente nos ayudan a proteger nuestras finanzas personales, sino que también nos van a permitir tener cierta calidad de vida, sobre todo si tenemos que afrontar la búsqueda de un nuevo empleo.
Además, también es fundamental destacar que durante una crisis económica los precios de los activos, como los bienes raíces y las acciones, pueden disminuir. Por lo que si tienes ahorros disponibles, puedes aprovechar estas oportunidades para invertir en activos con descuento y beneficiarte cuando los precios se recuperen.
Los mejores métodos para ahorrar dinero
Una vez tenemos clara la necesidad de ahorrar dinero en una época como la que estamos viviendo, es crucial abordar el hecho de cómo vamos a lograrlo. Porque, el principal problema que se nos presenta, es que tenemos salarios muy justos como para conseguir reducir aún más nuestros gastos.
No obstante, existen una serie de pautas relativamente sencillas, que pueden ayudarte a ahorrar algo de dinero todos los meses. Y, por poco que sea, siempre será un avance en tu objetivo.
Establece un presupuesto mensual
Uno de los principales problemas que solemos tener a la hora de ahorrar, es que no organizamos bien nuestros gastos mensuales. Si no sabemos cuánto vamos a gastar, es muy complicado tratar de reducir esta cifra. Por eso es importante tener un presupuesto y seguirlo para saber exactamente cuánto se puede gastar en diferentes áreas.
Reducir los gastos del día a día
Seguro que, si te paras a pensarlo, hay muchos gastos en los que incurres a diario y que podrías tratar de eliminar del cómputo mensual. Por ejemplo, puedes cancelar suscripciones que no se utilizan o renegociar contratos de servicios. Aunque pueda parecer poco, lo cierto es que vas a ver cómo finalmente notas un mayor ahorro a nivel mensual.
Guarda el dinero a principios de mes
Otro error sumamente habitual a la hora de ahorrar dinero es que intentamos esperar hasta final de mes para guardarlo en la hucha o en nuestra cuenta de ahorro. Esto supone que, ante cualquier imprevisto que salga, gastaremos ese dinero y a final de mes tendremos mucho menos para guardar. Sin embargo, si estableces una transferencia automática a una cuenta de ahorros cada mes y la realizas a primeros, podrás asegurarte de que se está ahorrando una cantidad fija regularmente. Eso sí, asegúrate de que se trata de una cantidad que puedes abonar.
Evita comprar de manera impulsiva
La mayor parte de las compras que ejecutamos se producen de manera impulsiva, lo que supone un gasto innecesario del que apenas nos damos cuenta. Para controlarlo, lo mejor es tratar de pararse a pensar antes de realizar la compra y valorar si realmente se necesita ese producto o solamente es un capricho.
Haz una lista de la compra y compara precios
Hacer una lista de la compra antes de ir al supermercado y ceñirse a ella puede ayudar a evitar compras innecesarias. Al igual que ir a comprar con el estómago lleno, ya que si no el hambre puede influir en el hecho de que adquiramos más productos. Además, también es muy interesante optar por productos de marca blanca o genéricos en lugar de marcas costosas porque nos pueden ayudar a ahorrar dinero a largo plazo. O, en cualquier caso, investigar los precios antes de hacer una compra para encontrar las mejores ofertas.
Pequeños gestos para ahorrar grandes cantidades
Como puedes observar, ahorrar no es tan complicado como parece y realmente se basa en la aplicación de pequeños gestos en nuestro día a día. De esta forma, y aunque creamos que es poco dinero, verás cómo estableces un sistema de ahorro que te permita tener cierto respaldo económico frente a imprevistos. Esperamos que estos consejos te sirvan para a lograrlos y te animamos a que nos cuentes si tienes algún truco adicional que quieras incluir.