Es evidente la revolución que ha creado Marie Kondo con respecto al orden y a la limpieza de los hogares para la generación de alegría y de felicidad, además de ofrecer el famoso método KonMari con el cual disfrutar de una excelente tasa de flexibilidad para ser adaptado a múltiples situaciones y así alcanzar el éxito que implica la organización y la limpieza en los hogares, en el trabajo y en cualquier lugar donde sea colocado en práctica.
La escritora japonesa Marie Kondo es una gran entusiasta de defender la purga de los objetos para disminuir la cantidad de ellos y avanzar con mayor facilidad en el orden y la limpieza de los espacios. Pero las cosas tienden a volver a acumularse ante cualquier descuido y es por ello que recomienda un mecanismo de limpieza llamado move-out o falsa mudanza. Un método creado por la organizadora profesional Katie Holdefehr y que tiene muchos rasgos en común con el KonMari.
Ordenando el hogar con éxito gracias a Marie Kondo
Limpiar y ordenar es la propuesta principal de Marie Kondo y de todas las organizadoras profesionales y nada mejor que aprovechar los precisos momentos de los cambios de temporada o en general cuando el ruido visual que transmite la habitación es insoportable. Para ello es importante utilizar la técnica de la falsa mudanza y repetir el proceso que se debe hacer cuando hay un cambio de casa, pero evidentemente en esta oportunidad sin mudarse.
Tanto Marie Kondo como la autora del método enfatizan que los resultados obtenidos son geniales y funcionan para mucho más que ordenar y limpiar los espacios, al conseguir un desempeño que permite comenzar con las tareas desde cero. Esto quiere decir que mantiene un profundo y evidente sentido filosófico que se une al hecho de la propia limpieza y ordenamiento de todo el hogar.
Marie Kondo explica el método de la falsa mudanza
Lo importante es replicar una mudanza, pero sin llevarla a cabo y aprovechar el hecho de comenzar de cero y conseguir ordenar y colocar todo de nuevo. Con el correspondiente aprendizaje de los errores cometidos por las experiencias anteriores y con el plus de que todo este recomienzo será en el mimo hogar, para transformarlo a través del orden y de la limpieza ofrecida por el método de la falsa mudanza.
La infaltable e importante planificación
La fase inicial del método de la falsa mudanza se basa en la planificación, debes elegir la fecha exacta en la que se iniciara la operación de orden y de limpieza del hogar y mantener la más elevada responsabilidad para no posponerla. Se deben definir las zonas o las áreas a ser atendidas, ya que el método de la falsa mudanza no ataca de un solo golpe a toda la vivienda, permitiendo que sea posible llevar a cabo la limpieza por partes y con ello evitar cualquier tipo de estrés.
A limpiar, pero antes todo fuera
Inicia el proceso con el primer objetivo que consiste en vaciar la habitación a ser ordenada, la limpieza debe ser a fondo e incluir muebles, armarios y sistemas de almacenamiento, para lograr una perfecta clasificación de todos los objetos y un correcto reacomodo de los mismos. Si piensas cambiar el estilo decorativo del ambiente, este es el momento indicado para cambiar de lugar el mobiliario o incorporar nuevos accesorios a la habitación.
Clasificar para solo quedarte con lo necesario
Es importante reconocer qué es lo que realmente necesitas y lo que no te hace falta, recuerda dejar de lado la nostalgia y mantén en mente la necesidad de reducir el número de posesiones, ya que a mayor minimalismo es más eficiente la limpieza y se facilita el hecho de ordenar. Marie Kondo es enfática en este paso y lo denomina “crucial y esencial” para alcanzar el éxito al momento de establecer una limpieza con el método de la falsa mudanza.
Reordena para mejorar los espacios
Con la habitación vacía es importante que puedas visualizar la mejor opción para clasificar y reordenar los objetos. Mantén a mano todos aquellos que consideres indispensables y que realmente uses y mejor aún si se trata de muebles o soluciones de almacenamiento que mantengan una multifuncionalidad, como las cajas organizadoras, los estantes y todo aquello que de una manera u otra faciliten que el orden pueda quedarse en el hogar.