El Isopropanol, o mejor conocido como alcohol isopropílico, es el más sencillo de todos, económico, incoloro, tiene un olor bastante intenso y es considerado el más apto para la limpieza. Es ampliamente usado en la mayoría de los centros de salud como hospitales y clínicas para limpiar y desinfectar hasta combatir bacterias y microorganismos.
Además de eso, es un producto verdaderamente útil como limpiador antiséptico, ya que es capaz de remover polvo y marcas de suciedad en diversas superficies, una de ellas: los aparatos electrónicos, metales y los azulejos. No obstante, su utilización no se limita allí. Los usos del alcohol isopropílico en la limpieza del hogar son versátiles y realmente sorprendentes.
Más adelante te contamos cómo emplearlo para limpiar y aprovechar al máximo todas sus propiedades y cualidades para la desinfección. ¡Toma nota!
¿Qué es el alcohol isopropílico y donde comprarlo?
Frecuentemente llamado como Isopropanol, 2-propanol o IPA es un alcohol soluble en agua que se caracteriza por su rápida absorción. Se trata de un desinfectante poderoso, de hecho, numerosos estudios que demuestran su alta efectividad a la hora de la eliminación total de agentes bacterianos en diversas superficies y objetos.
Es un producto de venta libre en farmacias, supermercados y otros comercios afines y su precio es considerablemente asequible (menos de 9 euros por litro). Normalmente, se encuentra presentaciones de 1 litro o más, en aerosol o spray y su concentración está indicada en la etiqueta superior al 99%.
Usos del alcohol isopropílico en la limpieza
Esta sustancia es ideal, muy utilizada en el ámbito industrial, sin embargo, debe usarse con extremo cuidado para la seguridad propia y la del resto de miembros del hogar. Es inflamable, por lo que debe aplicarse lejos del fuego, asimismo, tiene un elevado nivel de toxicidad, razón por la que no se debe verter en alimentos para desinfectar y su inhalación puede causar dolor de cabeza, irritación en la zona respiratoria y somnolencia.
Finalmente, te recomendamos aprovecharlo como agente de limpieza para higienizar espejos, cristales, metales, componentes electrónicos y aparatos, pero siempre ponte guantes para evitar irritar la piel. Fíjate en otras aplicaciones del alcohol isopropílico en el hogar:
Eliminación de plagas
Con un pañuelo y abundante alcohol frota con un poco de fuerza los objetos que hayan estado en contacto con insectos, parásitos o agentes alérgenos, (los peines y juguetes de las mascotas son un ejemplo de esto). La acción desinfectante del alcohol erradicará la mayoría de los microorganismos.
Quitar manchas
El isopropanol quita marcas, mugre y grasa en paredes con pintura a base de aceite, azulejos y juntas, sobre todo las marcas de humedad y moho. Agrega el líquido sobre la zona afectada y frota con una esponja o trapo hasta que desaparezca. También desaparece manchas en la ropa como las de la pluma y elimina manchas ocasionadas por tinta a base de aceite.
A tener en cuenta: si se trata de superficies de mármol, diluye a partes iguales el alcohol isopropílico con agua fría ¡No lo apliques directamente!
Desaparece el mal olor
Además de ser capaz de esterilizar, aniquila el hedor en zapatos, bolsos, cartera y gorros. Rocía un poco o humedece un paño en este producto y pásalo por la superficie y percibe como el mal olor desaparece.
Limpiar objetos de vidrio como ventanas y espejos
Este aliado infalible es perfecto para lavar las ventanas y los espejos, pues no deja manchas y hace que tus cristales reluzcan ¡Aun si están muy manchados! Fabrica una solución mezclando alcohol isopropílico y agua a partes iguales y frota con un pañuelo para remover suciedad.
Sirve para limpiar pantallas
Existe una eterna lucha entre cuál es mejor para limpiar pantallas ¿El vinagre o el alcohol? La respuesta es la segunda. El alcohol isopropílico, gracias a su rápida evaporación, es ideal para limpiar las pantallas de forma segura de todos aquellos aparatos electrónicos como laptop, tableta, móvil, monitor de ordenador, cámara digital, televisor, lente y un sinfín de productos. Para ello, impregna un paño de microfibra en este producto y pásalo de arriba hacia abajo para que no queden marcas.
No olvides que la laptop o la pantalla del móvil acumula una enorme cantidad de bacterias. Es recomendable desinfectarlos con toallitas humedecidas en alcohol isopropílico como mínimo una vez a la semana.
Limpieza de dispositivos electrónicos
Los aparatos electrónicos, como el ordenador, impresoras o cámaras, están compuestos de muchas partes pequeñas, de difícil acceso y complicadas de limpiar, ya que requieren de suma precaución y cuidado especial. Impregna una mopa de algodón, un trapo pequeño o un pincel de cerdas suaves con un poco de alcohol y limpia de manera muy meticulosa los componentes de hardware, baterías, placas base, ranuras, chips interruptores y demás.
¡Recuerda hacerlo con el aparato apagado y frío!
Combate los gérmenes del suelo
Siendo menos tóxico que otros productos de limpieza, el AIP es de gran ayuda para eliminar la grasa, sucio y agentes microbianos que existan en el suelo de baldosa, en especial en la cocina. Diluye un poco de alcohol trapea la superficie como lo haces normalmente.
Nota: no es recomendable en suelos de madera natural.
Abrillantar la joyería y otros metales
Muchas personas lo utilizan para pulir sus joyas de plata y oro ennegrecidas. Una fácil y eficaz forma de desinfectarlos y devolverles el brillo, es sumergirlos en este alcohol, dejaros reposar durante 5 o 10 minutos y luego pulir con un pañuelo de microfibra o un trapo que no deje pelusa.
Con tus objetos de uso cotidiano como el cortaúñas o pinzas, el proceso es similar. Simplemente, debes humedecer un pañuelo o algodón con el alcohol y pulir hasta obtener el brillo deseado.