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Hacks para blanquear los dientes con bicarbonato de sodio que pueden hacer más MAL que bien

El bicarbonato de sodio es el mejor ingrediente que puedes usar para aclarar tu sonrisa.

Cepillarse los dientes con bicarbonato de sodio es considerado un método natural y muy eficaz de blanquear la dentadura, pero ¿es esto realmente cierto? El bicarbonato de sodio es un compuesto bastante abrasivo que, al frotarse en la superficie de los dientes, es capaz de eliminar las manchas que causa el beber café, té y fumar, es decir, todos los desechos que se acumulan en la superficie de los dientes. Por lo tanto, hasta cierto punto puedes blanquear los dientes y prevenir cierta decoloración.

Entonces, si estás buscando la forma de evitar la desagradable experiencia de visitar el consultorio del odontólogo y al mismo tiempo, ahorrar dinero, usa bicarbonato de sodio un par de veces a la semana como rutina de limpieza, para recuperar tu radiante sonrisa. Este método natural y sencillo, te ayudará a eliminar partículas sin dañar el esmalte dental.

¿Cómo debo usar el bicarbonato de sodio para blanquear los dientes?

El bicarbonato de sodio puede utilizarse con solo un poco de agua para eliminar las manchas de la superficie de los dientes. También puedes hacer una mezcla usando peróxido de hidrógeno para potenciar el efecto blanqueador. Peor, si lo prefieres, mézclalo con tu pasta de dientes regulares. Además de blanquear la superficie de los dientes, estas mezclas puede eliminar la placa que causa caries y enfermedades de las encías.

blanquear dientes

Podrías recibir recomendaciones, que afirman que el jugo de limón y el bicarbonato de sodio es una buena mezcla para mejorar las capacidades de blanqueamiento, pero no es cierto. El jugo de limón es ácido y en realidad puede arruinar el calcio de los dientes corroyéndolo o destruyéndolo. Además, el jugo de limón también puede causar cierta inflamación de las encías.

¿Es seguro usar bicarbonato de sodio para blanquear tu dentadura?

El bicarbonato de sodio debe usarse correctamente para proteger el esmalte de los dientes. No se recomienda usar con demasiada frecuencia, ya que puede dañar el esmalte como resultado del uso repetido. Por lo general, solo debe usarse una vez o dos veces por semana y durante unos dos minutos como máximo.

El bicarbonato de sodio tampoco debe usarse como reemplazo de la pasta de dientes, ya que no contiene flúor que proteger los dientes de las caries y también fortalecerá el esmalte. Lo más recomendado es consultar con tu dentista antes de usar bicarbonato de sodio para cepillarse los dientes, ya que podrías tener problemas de encías preexistentes que te hagan sensible.

Esto debido a que existen algunos riesgos relacionados con el uso de bicarbonato de sodio. Antes que nada, puede dañar el esmalte, lo que puede hacer que los dientes se vuelvan más sensibles de lo que deberían ser a las temperaturas frías o calientes, y también puede hacer que cepillarlos sea doloroso.

El bicarbonato de sodio también puede debilitar el pegamento o adhesivo de los aparatos ortopédicos y, por lo tanto, no debe ser utilizado por personas con estos accesorios. También, puede aplicarse incorrectamente, ya que no hay un procedimiento estándar.

¿Qué manchas no se quitan con bicarbonato de sodio?

El bicarbonato de sodio generalmente no funcionará en una amplia variedad de manchas. Las más profundas o severas requieren un producto blanqueador para lograr el efecto deseado. Considera también que hay manchas de los dientes internas, mientras que otras son externas, y algunas manchas se pueden tratar con productos blanqueadores, mientras que otras no.

Los métodos de blanqueamiento más comunes son los tratamientos profesionales en el consultorio, los kits profesionales para uso en el hogar y los productos de venta libre. En estos caos lo mejor será usar tratamientos profesionales de blanqueamiento que son aplicados en el consultorio del dentista y pueden completarse en aproximadamente una hora.

En el mercado encontrarás productos de venta libre, como tiras, pastas blanqueadoras o chicles, que son asequibles, y es posible que la mezcla de estos tratamientos tenga un efecto positivo. Pero, cepillarse los dientes con bicarbonato de sodio puede ser una forma más barata de eliminar las manchas de los dientes y al ser mezclado con peróxido de hidrogeno, podrías tener el efecto que deseas, ya que muchos de estos productos en su lista de ingredientes reportan este par.

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